Las acciones se desplomaban el viernes en la Bolsa de Nueva York, al grado de que incluso el índice Dow Jones cayera brevemente más de 1.000 puntos, después de que Sudáfrica encontró una variante de coronavirus más contagiosa y que parecía propagarse más rápidamente por todo el mundo.
Esto se sumó a la incertidumbre de los inversionistas sobre la posibilidad de revertir meses de progreso para controlar la pandemia de COVID-19.
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Poc antes del cierre de operaciones el índice S&P 500 bajaba 2,3%, rumbo a su peor caída desde febrero. El compuesto Nasdaq bajaba 2%.
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Las aerolíneas y otras acciones de viajes caían mientras las autoridades de salud en Europa y Reino Unido proponían suspender los viajes aéreos desde el sur de África debido a la nueva variante del coronavirus. El precio del petróleo cayó más del 13% ante las preocupaciones de otra desaceleración de la economía mundial.
Empresas de viajes como Royal Caribbean, Carnival y Norwegian Cruises también caían.
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El rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años cayó a 1,51% desde 1,64% el miércoles. Como resultado, los bancos sufrieron algunas de las pérdidas más importantes. JPMorgan Chase cayó 4%.
Ha habido otras variantes del coronavirus —la variante delta arrasó en gran parte de Estados Unidos durante el verano— y los inversionistas, los funcionarios públicos y la gente están nerviosos por cualquier nueva variante que se esté extendiendo. Han pasado casi dos años desde que surgió el COVID-19, matando a más de 5 millones de personas en todo el mundo hasta ahora.
Este viernes, la bolsa de Nueva York cerraba temprano, a la 1 p.m., hora del este de Estados Unidos, debido al fin de semana largo por el Día de Acción de Gracias.
