El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, acusó al gobierno chino de reservarse “información crucial” respecto de los orígenes de la pandemia de coronavirus, luego de hacerse conocido esta semana el resultado de un informe realizado por servicios de inteligencia del gigante norteamericano, que no resuelve el tema del surgimiento del virus SARS-CoV-2 ni da luces en relación a que el covid-19 haya sido desarrollada como un arma biológica oriental.
“Existe información crucial sobre los orígenes de esta pandemia en China, pero desde el principio los funcionarios del gobierno chino han trabajado para evitar que los investigadores internacionales y miembros de la comunidad de salud pública mundial accedan a ella”, señaló Biden en un comunicado presentado este viernes en EE.UU.
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“Hasta el día de hoy, China sigue rechazando los llamamientos a la transparencia y reservándose información, incluso cuando el número de víctimas de esta pandemia sigue aumentando”, enfatizó el mandatario, quien profundizó en que el documento clasificado de los servicios de inteligencia de su país se inclina, con un “bajo grado de confianza”, hacia que el origen de la enfermedad haya sido provocada por la exposición natural “a baja escala” a un animal infectado en noviembre de 2019.
La respuesta de China a las acusaciones de Joe Biden
Como era de esperar, el gobierno asiático criticó en duros términos los hallazgos del informe nortamericano, acusando a las agencias de inteligencia de EE.UU de una evidente “manipulación política”.
“El informe de la comunidad de inteligencia estadounidense muestra que Estados Unidos está empeñado en ir por el camino equivocado de la manipulación política”, expuso, en otro comunicado, la legación diplomática de China.
“Se basa (las conclusiones del texto de EE.UU.) en una presunción de culpabilidad de China y es solo para hacer de China un chivo expiatorio”, explicaron.
“Estados Unidos está repitiendo sus viejos trucos (con estudios) que no cuentan con bases científicas ni credibilidad”, enfatiza el comunicado chino, que da cuenta que “desde el brote de la pandemia, China siempre ha seguido los principios de apertura, transparencia y responsabilidad” respecto de los datos aportados a la OMS para explicar el origen de la pandemia.
