El renunciante exgobernador y ahora delegado por la estadidad, Ricardo Roselló Nevares, admitió en entrevista radial que durante su paso por la gobernación cometió una gran cantidad de errores.
“No es uno, sino muchos. Yo creo que yo dejé un récord (…) Yo creo que hubo un poquito de sobre confianza en mi parte, en que yo entendía que me podía tirar el mundo en contra, siempre y cuando el objetivo fuese adelantar la agenda de reforma y en esa trayectoria creó muchísimos enemigos, verdad, enemigos poderosos”, alegó en entrevista en WPAB 550.
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Según dijo, creó enemigos con el cartel de los petróleos, las uniones, alcaldes y demás.
“Yo me convertí un poquito obsesivo en el trabajo y en la gestión, y perdí, y no me dediqué tiempo a crear relaciones tanto en la legislatura, en otros alcaldes, delegaba a otros mientras yo hacía un trabajo que entendía era importante y entendía que era urgente, pero hoy día me doy cuenta de que eso era importante”, continuó.
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Sobre su trabajo sin remuneración como cabildero por la estadidad, Rosselló Nevares dijo que “al final del camino en todo esto, se va a elevar el rango de discusión nacional que va a ser inevitable. Porque el asunto de Washington DC y el asunto de Puerto Rico tocan la fibra de una ruta que bifurca entre una definición de la nación americana y otra. Vamos a llegar a un momento en que nosotros como nación americana vamos a tener que tomar una decisión de qué queremos ser como nación americana”.
“Yo creo que es inevitable -si nosotros hacemos nuestro trabajo- que el asunto de Puerto Rico y de Washington estén entrelazados en esos conceptos y que será el Congreso quien tiene que decidir si queremos ser una nación apartada del mundo, o abierta al mundo yendo hacia adelante”, concluyó.
