El fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, ha informado este lunes de la detención del dueño de la embarcación que naufragó el pasado viernes en Güiria, estado de Sucre, en la que habrían muerto 20 migrantes venezolanos.
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“El Ministerio Público ha solicitado ordenes de allanamiento para lograr la captura de seis personas más relacionadas con este lamentable hecho contra quienes recaerán TODO EL PESO DE LA #LEY”, ha publicado Saab en un hilo de Twitter.
Además, el Ministerio Público ha solicitado la emisión de una orden de detención internacional contra Alberto del Valle Abreu Cedeño por este caso.
La investigación está a cargo de la Fiscalía 3° con sede en Güiria y la Fiscalía Nacional 66° adscrita a la Dirección General de Protección a la Familia y la Mujer, ha explicado Saab, que ha señalado que se trata de un posible caso de “tráfico y trata de personas”.
Saab ha recordado que en hechos similares anteriores los tribunales condenaron a 17 personas por delitos de trata de personas y asociación, tipificados en la Ley Orgánica contra la Delincuencia Organizada y Financiamiento al Terrorismo.
“El Ministerio Público ratifica su compromiso para sancionar a los responsables de estos graves delitos quienes se han organizado como mafias que operan entre Sucre y la isla de Trinidad para promover con fines infrahumanos la trata y el tráfico de personas”, ha añadido Saab.
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Medios afines a la oposición venezolana habían denunciado la muerte de 19 personas tras el naufragio, pero las autoridades no han dado información oficial alguna al respecto hasta este lunes.
La oposición venezolana ha expresado su pesar por las muertes y las ha atribuido a la “dictadura” del presidente Nicolás Maduro. Así, el dirigente opositor Juan Guaidó indicado que “son víctimas de una dictadura criminal, de una red de trata de blancas, de seres humanos. Fueron expulsadas de su país”.
“Los venezolanos prefieren arriesgar su vida para intentar escapar de la dictadura de Maduro que someterse a la miseria y el hambre. Es un drama humano, igual al que se vive en Cuba y Siria. Urge que el mundo abandone agendas ideológicas y nos unamos para poner fin a esta tragedia”, ha añadido.
Hace tres semanas un grupo de migrantes venezolanos, incluidos 16 niños, fue deportado de Trinidad y Tobago y permaneció 48 horas en altamar antes de regresar a la isla amparados por la orden de un tribunal, informa el portal venezolano Efecto Cocuy. Las autoridades de Trinidad y Tobago alegan que las fronteras se encuentran cerradas por la pandemia de coronavirus.
El 9 de diciembre, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) otorgó medidas cautelares a seis niños venezolanos involucrados en el caso.
