Berlín – Los pedidos para imponer restricciones más duras en Alemania aumentaban el viernes mientras el centro de control de enfermedades del país reportó nuevos récords de contagios y decesos por coronavirus.
Según el Instituto Robert Koch, los 16 estados del país confirmaron 29.875 nuevos casos de COVID-19 en las últimas 24 horas, batiendo la anterior marca de 23.679 alcanzada en la víspera.
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La cifra de fallecidos por el virus subió en 598 personas para un total de 20.970. El anterior récord, 590, se había establecido el miércoles.
“La única posibilidad que tenemos de tomar el control de la situación es un confinamiento, pero debe ser inmediato”, dijo el ministro del Interior, Horst Seehofer, al semanario Der Spiegel. “Si esperamos hasta Navidad, tendremos que seguir luchando contra estas cifras durante meses”.
Bajo las restricciones actuales, decretadas a principios de noviembre luego de un repunte en el número de infecciones y muertes, los restaurantes, bares, centros de ocio y deportivos cerraron sus puertas y los hoteles están cerrados al turismo, pero las escuelas y los comercios no esenciales siguen operativos.
Las cifras de la pandemia se habían estancado, aunque en su punto más alto, y han vuelto a repuntar en los últimos días.
Esto llevó a la canciller, Angela Merkel, a pedir esta semana a los gobiernos estatales, que son los responsables de imponer y levantar las restricciones, que consideren el cierre de las escuelas antes de Navidad y otras medidas.
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“Estamos en un momento decisivo, quizás en la fase decisiva de la lucha contra la pandemia”, afirmó.
Se esperaba que Merkel se reúna con los gobernadores para discutir las nuevas medidas no más tarde del domingo.
Las últimas encuestas indican que casi el 50% de los alemanes están a favor de la imposición restricciones más duras, mientras que el 35% apoya las actuales. El país ha registrado agresivas protestas contra las normas que han despertado mucho revuelo, pero los sondeos indican que menos del 15% de los alemanes creen que son demasiado estrictas.
En Grecia, las autoridades anunciaron que las librerías y las peluquerías podrán reabrir a partir del lunes, pero otras tiendas minoristas, lugares de entretenimiento, restaurantes, bares y cafeterías seguirán cerradas durante la Navidad como parte del segundo confinamiento en el país.
A partir del 18 de diciembre, la cuarentena obligatoria de 10 días para todos los viajeros que llegan al país se reducirá a tres días, pero el toque de queda entre las 22:00 y las 05:00 se mantendrá durante las fiestas.
A pesar de las restricciones impuestas hace cinco semanas, la cifra de contagios sigue siendo alta, incrementando la presión sobre el sistema de salud nacional, señaló el vocero del gobierno, Stelios Petsas. Las unidades de cuidados intensivos están al 83% de su capacidad en el conjunto del país y al 91% en Salónica, una ciudad del norte muy golpeada por el virus.
Las iglesias podrán recibir fieles el día de Navidad y en la Epifanía, el 6 de enero, pero el aforo se limitará en función del tamaño del templo.
Grecia ha registrado más de 121.000 positivos confirmados y 3.370 decesos.
