Se quedan sin pasajeros la AMA y el Tren Urbano en medio de la pandemia

La pandemia del coronavirus COVID-19 ha reflejado una significativa baja en los usuarios del transporte colectivo público del área metropolitana como el Tren Urbano y la Autoridad Metropolitana de Autobuses (AMA).

Según información ofrecida por el presidente de la AMA y la Administración de Transporte Integrado (ATI), Josue Menéndez, actualmente unas 2,500 personas utilizan diariamente los servicios que ofrece la AMA. Esto representa una merma de alrededor 6,500 pasajeros si se compara con los pasajeros que utilizaban este servicio para noviembre del pasado año, cuando se estima que eran unos 9 mil diariamente.

En el caso del Tren Urbano, la reducción es aun mayo. Mientras para noviembre del pasado año se estimaba en unos 20 mil usuarios diarios, ahora se reportan unos tres mil pasajeros. Esto representaría una reducción de 17 mil pasajeros.

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Desafíos en la protección del planeta

En cuanto al impacto económico, con la reducción de 6,500 usuarios, la AMA tiene perdidas de $120 mil mensuales según la información provista. De acuerdo a la oficina gubernamental, la merma económica está cobijada por el programa federal de ayuda económica, CARES Act, debido al COVID-19.

En el caso del Tren Urbano, cuya disminución es aún mayor, tiene un impacto de $500 mil al mes.
Este golpe a la transportación pública se había intentado evitar cuando el pasado 22 de octubre, Menéndez, anunció las medidas de protección que se estarían tomando para disminuir la posibilidad de contagios del coronavirus en estos medios de transportación.

En el caso de las guaguas de la AMA, Menéndez había indicado que tanto los asientos como los pasamos se estarían desinfectando cada vez llegaran a sus terminales. Mientras que el chofer está protegido por un acrílico. Además, dentro del vehículo hay desinfectante disponible para los usuarios.

En el caso del Tren Urbano, se informó que los trenes se desinfectan cada vez que lleguen a la estación de Sagrado Corazón. Además, se desinfectan las áreas comunes, como pasamanos y boletería.

Por orden ejecutiva, el Gobierno había detenido estos servicios hasta el pasado 25 de octubre, fecha en que comenzaron en medio de la pandemia.