Al cabo de la séptima semana de la cuarentena por el COVID-19, la isla ha experimentado pérdidas de más de 9 billones de dólares, por lo que es preciso seguir adelante con los planes de reactivar la economía.
Así lo dijo el miércoles Carlos López Lay, presidente y principal oficial ejecutivo de Bella Group e integrante del “Task Force” Económico creado por el gobierno.
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“Basado en los números preliminares que tenemos, nos ha costado ya a la economía del país sobre 9 billones de dólares. Cada semana que pasa estamos hablando prácticamente de 1.5 billones más. No soy economista, pero esos son los estudios que nos han presentado”, dijo López Lay en entrevista radial (NotiUno).
La gobernadora, Wanda Vázquez Garced impuso un toque de queda y cierre de comercios desde el 15 de marzo pasado para contrarrestar los contagios de esta condición y que fue extendido hasta el 3 de mayo. Al momento, diversos sectores del país reclaman por una reapertura escalonada de la actividad económica local.
López Lay indicó que sobre 65 mil personas han seguido trabajando en medio de la emergencia y que solo se han identificado 25 contagios.
“Por 45 o 46 días hemos estado en nuestras casas, hemos estado siguiendo instrucciones, hemos visto que se tomó una buena decisión (con la cuarentena). Pero, ¿hasta qué momento nosotros vamos a seguir en nuestras casas cuando estamos viendo el sufrimiento de varios sectores, especialmente el sector de la salud?”, dijo el empresario boricua.
Asimismo, indicó que se estableció la iniciativa llamada “Estamos listos, nos toca a todos” que incluye empresarios y organizaciones sin fines de lucro a los fines de lograr reincorporar la actividad económica.
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“Nos toca a todos con unos nuevos comportamientos y hábitos. Nosotros no podemos esperar a salir de nuestras casas hasta que llegue la vacuna o la medicina. Tenemos que integrarnos pausadamente, paulatinamente, pero tenemos que empezar ya. Las medidas están y sabemos cuáles son. Han habido contagios, pero realmente son mínimos”, dijo López Lay.
“Nos sentamos con la gobernadora por espacio de dos horas, hablamos con ella, se le explicó, se le llevaron ejemplos. Hablamos cándidamente. Yo sé que ella tiene una situación difícil en sus manos. Tomar una decisión o no tomar una decisión, ambos van a tener una repercusión. Ella tiene que entender que hay que tener un balance y seguir adelante con las debidas precauciones”, finalizó.
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