El gobernador de Florida, Ron DeSantis, emitió el miércoles una orden a nivel estatal para que todos los habitantes se queden en casa, mientras aumentaba la presión federal y local para que abandonara la estrategia de decidirlo condado por condado que había implementado para combatir la pandemia, una postura que ha defendido durante semanas.
DeSantis le dijo a la prensa que decidió emitir la orden después de consultar con el presidente Donald Trump y con asesores de la Casa Blanca, quienes han dicho que los estadounidenses deberían quedarse en casa todo abril. Su orden entrará en vigor a las 12:01 a.m. del viernes y estará vigente por lo menos 30 días.
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Quedan exentas de la orden las salidas para comprar alimentos, medicamentos y gasolina, visitar al médico, hacer ejercicio al aire libre y transportarse al trabajo considerado esencial. Todos los negocios no esenciales deberán cerrar sus oficinas y tiendas, pero podrán permitir que empleados trabajen desde casa cuando sea factible.
“Incluso aunque hay muchos lugares en donde hay tasas de infección muy bajas, tiene sentido tomar esta medida ahora”, dijo DeSantis. “Esto es con lo que lucharemos durante un mes. No habrá ningún tipo de regreso a la normalidad. La gente pensó que Pascua… eso no va a suceder”.
Los casos de coronavirus confirmados en el estado de Florida se acercan a los 7,000, con 86 muertes y casi 900 personas hospitalizadas, y un modelo del brote mencionado en la Casa Blanca indica un crecimiento exponencial para las próximas semanas. Más de una treintena de estado emitieron órdenes de confinamiento en casa hace una semana o más.
El republicano hizo el anuncio horas después de que el director de salud pública de Estados Unidos, doctor Jerome Adams, dijera en el programa “Today” de la NBC que le diría a DeSantis que las guías federales de distanciamiento social deberían considerarse como “una orden nacional de quedarse en casa”.
Un modelo de la Universidad de Washington pronostica que Florida podría tener un rápido aumento en muertes y hospitalizaciones, con 100 muertes diarias para mediados de abril y más de 175 para el 1 de mayo, cuando la cifra se acerque a su pico. Pronostica que 10,000 personas necesitarán atención hospitalaria para mediados de mes y 20,000 para el 1 de mayo. El modelo pronostica que más de 6,500 residentes del estado morirán del virus para el 1 de junio, entre las más de 90,000 muertes a nivel nacional.
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DeSantis no negó esos números el miércoles cuando le preguntaron sobre ellos.
“Esto es terrible”, dijo DeSantis. “Es algo que ha causado mucho daño a mucha gente”.
En la mayoría de la gente, el nuevo coronavirus provoca síntomas leves o moderados que desaparecen en entre dos y tres semanas. En algunas personas, sobre todos los adultos mayores y las que padecen problemas de salud subyacentes, puede provocar enfermedades más graves, como la neumonía, e incluso la muerte. La mayoría de la gente se recupera.