El gigante tecnológico Apple anunció ayer, sábado, el cierre de sus tiendas fuera de China por dos semanas y sólo venderá por internet como parte de los esfuerzos por contener la pandemia del nuevo coronavirus.
“En nuestros lugares de trabajo y comunidades, debemos hacer todo lo posible para prevenir la propagación del COVID-19”, tuiteó el director general Tim Cook el sábado. “Apple cerrará temporalmente todas sus tiendas fuera de la región de Gran China hasta el 27 de marzo y destinará 15 millones de dólares para ayudar en la recuperación mundial”.
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En un comunicado en línea más extenso, Cook detalló que las tiendas de Apple en China ahora han reabierto sus puertas e indicó que lo que la compañía ha aprendido ahí ha ayudado con el desarrollo de “mejores prácticas que estamos fomentando enormemente en nuestra respuesta global”.
Una de las lecciones que Apple aprendió en China es que “la manera más efectiva de minimizar riesgos de la transmisión del virus es reducir la densidad y maximizar el distanciamiento social”, aseveró. Es por ello que la compañía está tomando nuevas medidas para proteger a sus trabajadores y clientes conforme la tasa de infección aumenta en otros lugares.
La tienda de Apple en línea permanece en operaciones. Los trabajadores seguirán percibiendo su salario y el personal administrativo trabajará a distancia en caso de ser posible, afirmó Cook en un comunicado emitido el viernes.
La compañía cuenta con más de 500 tiendas minoristas en todo el mundo, y aproximadamente la mitad se encuentran en Estados Unidos. La compañía cerró temporalmente las 42 tiendas en China continental ante el brote del nuevo virus en el país.
Al anuncio se hizo horas después de que Apple afirmara que su conferencia anual Worldwide Developers sería totalmente virtual este año. Miles de ingenieros y clientes asisten al evento en San José, California, que está en su 31er año.
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El virus ha infectado a más de 145.000 personas a nivel mundial. La mayoría de los pacientes sólo presentan síntomas moderados y se recuperan en su totalidad, pero las personas mayores o con padecimientos previos son particularmente vulnerables. Más de 5.400 han muerto.
