Un impresionante gol de un adolescente de la academia del equipo llevó el domingo a Liverpool a la cuarta ronda de la Copa FA y extendió la sequía de 20 años de Everton en Anfield.
El resultado en el derbi de Merseyside fue familiar – Liverpool no ha perdido ante Everton en casa en ninguna competencia desde 1999 – pero el margen cerrado del 1-0 resultó sorpresivo.
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El muy elogiado Curtis Jones, un atacante de 18 años de gran habilidad técnica que se está en el club desde los seis años, fue uno de varios jugadores de la academia seleccionados por el técnico de Liverpool Jurgen Klopp para descansar a sus superestrellas. Y Jones celebró su rara titularidad en el equipo grande con un tiro desde 20 metros que se coló por debajo del larguero a los 71 minutos.
El estadio de Anfield estalló en júbilo y Jones corrió directamente hacia Klopp celebrando un gol que pudiera no poder rebasar jamás, pese a lo temprano de su carrera.
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El técnico del Everton Carlo Ancelotti presentó un fuerte equipo, algo raro para un entrenador de la Liga Premier en la Copa FA en estos días, pero no fue recompensado pese a que el equipo creó unas grandes oportunidades de gol en la primera mitad que terminaron en las manos del portero Adrian.
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Mientras tanto, un jugador oriundo de Liverpool en las postrimerías de su carrera fue la inspiración para la sorpresa más grande del día en la tercera ronda.
Wayne Rooney, de 34 años, ayudó al Derby de segunda división a eliminar a Cristal Palace 1-0.
Rooney, excapitán de Manchester United e Inglaterra, jugó los 90 minutos en su segundo partido con Derby desde su regreso al futbol inglés tras jugar en Estados Unidos con DC United.
El jueves, el futbolista participó en los dos goles del Derby en la victoria de 2-1 sobre Barnsley en la segunda división, y tres días más tarde Rooney jugó con autoridad en el medio del campo en la victoria sobre Palace, sellada por el gol de Chris Martin a los 32 minutos.
Chelsea avanzó a la cuarta ronda venciendo a Nottingham Forest 2-0, mientras que Sheffield United apenas escapó con un 2-1 sobre AFC Fylde, el último equipo no profesional que quedaba en la competencia.
