Las demoras en el esclarecimiento de crímenes terminan beneficiando a los imputados, según reflexionó el exsecretario de Justicia Luis Sánchez Betances, considerando las baja tasas de casos aclarados por la Policía.
“Hay un derecho a juicio rápido y, en ese sentido, el tiempo sí afecta”, dijo a Metro el licendiado. El procedimiento establece que el imputado puede solicitar la desestimación de su acusación o denuncia si, por ejemplo, estuvo en cárcel 30 días después de su arresto sin que se presente acusación o denuncia, o 60 días después no fue sometido a juicio, o no se le ha notificado la lista de los testigos, entre otras circunstancias.
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“Obviamente, la tendencia es, por la parte de defensa, en posponer, porque los testigos no aparecen, se les olvida, por ejemplo. Así que el tiempo es esencial, sin duda alguna”.
Un caso es esclarecido cuando se determina causa para arresto al imputado.
El abogado sugirió que algunas de esas dilaciones se dan entre la “relación de Policía y Fiscalía”. Sin embargo, opinó que el mayor obstáculo “es el Instituto de Ciencias Forenses, por la falta de técnicos, de una unidad de investigación de crimen”.
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