Manifestantes femeninas en diversas ciudades de Europa y otras latitudes observaron el domingo elDía Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, en el que decenas de miles marcharon en Madrid y otras fueron reprimidas con gas lacrimógeno en Estambul.
Centenares de mujeres se reunieron en la Plaza de Tünel para marchar por la principal avenida peatonal Istiklal en la ciudad turca. Decenas de policías formaron una barricada e impidieron que el grupo avanzara, argumentando que la movilización no estaba autorizada. La policía disparó varios cartuchos de gas lacrimógeno para frenarla.
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Las activistas continuaron su protesta con un plantón en la plaza, donde corearon lemas y después se dispersaron pacíficamente.
Grupos defensores de los derechos humanos afirman que la violencia contra las mujeres es generalizada en Turquía. Una base de datos en línea llamada Monument Counter afirma que al menos 337 mujeres fueron asesinadas en 2018 en actos de violencia de pareja.
El gobierno turco restringió especialmente las manifestaciones desde 2013 después de una oleada de protestas antigubernamentales, ataques extremistas y un estado de emergencia que duró dos años, el cual fue declarado tras un fallido golpe de Estado en 2016.
El grupo activista femenino Mor Cati dijo que el gobierno en Turquía estaba más preocupado por detener las protestas que en “impedir la violencia de parte de los hombres”.
En España, las activistas protestaron en más de 40 ciudades y localidades. En Madrid, decenas de miles se sumaron a un grupo feminista y corearon “Ni una menos. Libres nos queremos” a medida que avanzaban por el centro de la ciudad.
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Según cifras oficiales, 44 mujeres han muerto este año en España a manos de sus parejas actuales o exparejas. Desde 2003, cuando el país europeo comenzó a llevar registros, el número total de víctimas asciende a 999, de las cuales 972 son mujeres y 27 niñas.
En España se ha capacitado a más de 600 jueces en violencia de género y se prepara una reforma a las leyes sobre delitos sexuales tras la ira suscitada por recientes decisiones judiciales.
En Bruselas, con motivo de la cumbre UE-Brexit, el presidente del parlamento europeo, Antonio Tajani, lució una marca roja abajo de su ojo izquierdo mientras hablaba con la prensa. En Italia, su país natal, la marca representa apoyo a este día instaurado por las Naciones Unidas.
Tajani dijo en Twitter que “nada puede justificar la violencia contra las mujeres. Mi madre me lo enseñó. Yo se lo enseñé a mis hijos”.
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