Dicen que cuando comenzamos una relación adoptamos algunos de los comportamientos de nuestra pareja, de pronto, la música que antes nos parecía aburrida, ahora nos parece más interesante, incluso, modificamos algunos de nuestros gustos.
Todo parece indicar que al príncipe Harry, el eterno rompecorazones, el matrimonio con Meghan Markle lo ha hecho reflexionar.
PUBLICIDAD
Quizá es una de las prácticas de la realeza más criticadas y todo indica que Harry renunció a ello. De acuerdo a medios británicos, el hijo menor de Lady Di dejó atrás una tradición que era parte de su familia desde hace varias generaciones por su amor y compromiso con Meghan, quien es una fiel defensora de los animales.
De acuerdo con el diario británico ’The Sun’, Harry prefirió dejas atrás esa práctica pese a haberla practicado desde que tenía 12 años. Aunque fue recientemente que se dio a conocer que ya no formaría parte de la tradicional cacería anual de la familia real, desde el anuncio de su matrimonio con la actriz de Hollywood, Harry se apartó de estas prácticas.