El gobernador Ricardo Rosselló Nevares firmó el Proyecto del Senado 908 que recoge las enmiendas necesarias para viabilizar la reestructuración de la deuda del Banco Gubernamental de Fomento (BGF).
“Este acuerdo reafirma nuestro deseo de llegar a acuerdos con nuestros acreedores. Estas enmiendas simplificarán los procesos en el manejo de la deuda del Banco y proveerán un alivio de $300 millones para los municipios. De igual forma, los municipios verán deudas canceladas con los depósitos que tenían en el BGF”, sostuvo el primer ejecutivo.
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De igual forma, el gobernador explicó que mediante la Ley 109-2017 se creó el marco legal para reestructurar la deuda del BGF. No obstante, los efectos de los huracanes Irma y María hicieron que hubiera que regresar a la mesa de negociación.
“El nuevo acuerdo permite proveer un alivio financiero significativo a los municipios, ya que se autoriza la compensación de los depósitos y préstamos de estos con el BGF; lo que resulta en una reducción significativa de las deudas de los ayuntamientos con el BGF, proveyendo un alivio en flujo de efectivo”, expresó Rosselló Nevares.
Acuerdo
Asimismo, dijo que el nuevo acuerdo permite el desembolso, antes de la fecha del cierre de la transacción para la reestructuración de la deuda del BGF, de un 55% del exceso de la contribución adicional especial (el “Exceso CAE”). Esto será a aquellos municipios que tienen Exceso CAE en el BGF que aún no ha sido desembolsado.
Por su parte, el presidente del BGF, Christian Sobrino Vega, expresó que “los cambios al acuerdo de reestructuración negociados por el Gobierno beneficiarán significativamente a los municipios y a otros depositantes participantes. Esta pieza legislativa introduce las enmiendas necesarias para permitir la implementación del nuevo acuerdo para la reestructuración de la deuda del BGF. Con la firma de esta ley ponemos punto final a la reestructuración de la deuda del BGF, de manera satisfactoria para todas las partes”.
Finalmente, el primer mandatario concluyó que “este tipo de acuerdos nos da credibilidad ante nuestros acreedores para poder continuar con la reestructuración de la deuda de Puerto Rico y poder cumplir nuestras obligaciones sin afectar a los más vulnerables. Estamos convencidos de que el acuerdo enmendado es en el mejor interés del pueblo de Puerto Rico, los acreedores del BGF y la recuperación económica de Puerto Rico”.
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