Faltan muy pocos días para que la historia de amor del príncipe Harry y la actriz Meghan Markle sea sellada con un para siempre.
Mientras los ojos del mundo esperan con ansias la boda real, los amantes de la moda centran su interés en el ajuar de la novia y por supuesto, su costo.
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Muchos detalles de la boda se han hecho públicos, como por ejemplo la locación y la lista de invitados.
Pero uno de los secretos mejor guardados es quien vestirá a la novia el día mas importante de su vida.
Un secreto bien guardado
En la recta final del enlace nupcial, se desconoce el nombre de la casa que ha diseñado el vestido para Markle.
Solo cinco personas conocen esta información. Entre los nombres que suenan como opción se habla de Añexander McQueen, quien diseño el vestido de Kate Middleton, Ralph & Russo, que suena fuertemente por haber diseñado el traje de Meghan para el retrato oficial.
Otro nombre que también ha sido mencionado el de Giles Deacon, así como Victoria Beckham y el canadiense Erdem.
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Un presupuesto sin límites
Aunque el autor sigue siendo un misterio a estas alturas, lo que si se sabe es que el vestido alcanza un alto precio debido a sus particularidades.
En entrevista a la agencia AP la diseñadora Caroline Burstein, al frente de Browns Bride comenta que “El precio de un vestido de alta costura puede empezar en los 42 mil dólares hasta llegar a los 419.488”.
La diseñadora Phillipa Lepley asegura que un vestido como este requiere al menos de 60 horas de trabajo y puede aumentar dependiendo del detalle del bordado.
Un dato muy curioso que señaló Lepley, es que en el caso de un vestido con esta importancia “Probablemente haríamos tres pruebas para asegurar que todo esté al milímetro, absolutamente bien”.
