Propulsores de la anexión plena de Puerto Rico a Estados Unidos lanzaron una campaña, dirigida al papa Francisco, en contra del arzobispo metropolitano de San Juan, Roberto González Nieves, y el sacerdote Pedro Rafael Ortiz, a quienes acusa de sembrar “odio, ira y desolación” en el pueblo puertorriqueño.
La campaña, lanzada por el grupo Defensores de la Estadidad, se queja ante el Sumo Pontífice que a pesar de que “estamos tan necesitados de esa palabras de amor, esperanza y fe de nuestro líderes religiosos, que estamos sedientas de ellas, pero a cambio solo recibimos de estos dos grandes jerarcas de la iglesia católica, odio, rencor e ira”.
Los peticionarios, que esperan reunir mil firmas –de las cuales ya tienen más de la mitad– en la página charge.org, relatan que “nuestra isla, ha sufrido el embate de dos fenómenos atmosféricos, los cuales en estos momentos, está enfrentando grandes problemas sociales y económicos”.
“Su santidad Padre Francisco, nuestra isla está afrontando un gran problema que va más allá del poder de la naturaleza. Dos llamados a servir y representar la gracia divina de nuestro señor Jesucristo, el Pedro Ortiz y el Monseñor Roberto González Nieves; quienes utilizando el sagrado púlpito como podio político, están sembrando odio, ira y desolación en (un) pueblo que en estos momentos está afrontando el peor momento de su existencia”, argumenta textualmente el grupo.
No es la primera vez que sectores anexionistas lanzan una campaña contra el máximo jerarca de la Iglesia Católica puertorriqueña ya que, a finales de julio de 2015, exrepresentante Melinda Romero Donnelly encabezó una ofensiva en ese sentido al punto de que a principios de agosto de ese año se anunció falsamente que el papa le había solicitado la renuncia a monseñor González Nieves por su alegado activismo político a favor de la independencia de Puerto Rico.
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Defensores de la Estatidad asegura en su argumentación que es mínima la asistencia a las iglesias, “gracias a la doctrina (que) ellos quieren establecer en nuestra congregación”.
El grupo, que en el pasado realizó campaña contra la alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz Soto, para que no fuera elegida Persona del Año por la revista Time, argumenta que “estos líderes religiosos representantes de nuestra iglesia quieren impulsar en nuestro pueblo un régimen político socialista, comunista”.
Sostiene que donde existe un gobierno de esa naturaleza, “sólo ha causado sufrimiento, muertes y crisis humanitarias”, por lo cual considera que “es inaceptable como pueblo cristiano y católico (que) nuestras iglesias sean púlpitos políticos”.
“Aclamando su corazón, su nobleza y como representante de nuestro creador aquí en la tierra, le pedimos en nombre de 3.5 millones de habitantes puertorriqueños, un pueblo cristiano, (queremos que) estas personas sean removidos de nuestro país, por el bienestar de un pueblo en el aspecto social, económico y de sana convivencia entre hermanos”, demanda Defensores de la Estatidad en el documento, de pobre redacción, por lo que la agencia Inter News Service (INS) ha realizado correcciones de forma.
Recalcan que “como fieles creyentes en el gran Padre Celestial, hemos aceptado su voluntad del poder de la madre naturaleza”, no así la prédica de ambos religiosos católicos.