OTTAWA (AP) — El papa Francisco no se disculpará con los sobrevivientes de los internados canadienses y sus familias por el papel que cumplió la Iglesia Católica en el manejo de las escuelas ni por los abusos que padecieron los estudiantes.
Durante buena parte del siglo pasado, unos 150.000 niños de pueblos originarios, inuit y metis fueron arrancados de sus familias e internados en escuelas del gobierno donde se les obligó a convertirse al cristianismo y olvidar sus lenguas nativas. Muchos sufrieron azotes y abusos sexuales, y se dice que unos 6.000 murieron.
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El obispo Lionel Gendron, presidente de la conferencia canadiense de obispos católicos, dijo el miércoles en una carta a los pueblos indígenas canadienses que Francisco no ha dejado de reconocer las injusticias sufridas por los pueblos indígenas del mundo, pero que no puede ofrecer una disculpa personal por los internados canadienses.
“Los obispos católicos canadienses han mantenido un diálogo con el papa y la Santa Sede con respecto al sufrimiento experimentado por ustedes”, escribió Gendron. “Después de un estudio cuidadoso del pedido y un diálogo amplio con los obispos de Canadá, decidió que no podía responder en forma personal”.
La disculpa papal fue una de las 94 recomendaciones de una Comisión de Verdad y Reconciliación. El primer ministro Justin Trudeau pidió al papa que se disculpara durante una visita al Vaticano el año pasado.
