La Jornada Se Acabaron Las Promesas afirmó hoy que defenderá los servicios públicos, mientras propuso que la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) pase por un proceso de descentralización, colectivización y diversificación de fuentes de energía.
Portavoces del colectivo señalaron que la Junta de Control Fiscal (JCF) está aprovechando la devastación que existe en Puerto Rico tras el paso del huracán María para adelantar su agenda de recortes y austeridad. “Han propuesto un plan fiscal criminal e inhumano que incluye el cierre de más de 300 escuelas, el traslado de un 30% de la población penal a Estados Unidos, la venta de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) y el despido de miles de empleados públicos. De esta forma, están empujando a nuestras familias al exilio y destruyendo toda posibilidad de alcanzar una vida próspera y digna para nuestro pueblo”, indicaron en una comunicación escrita.
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“Puerto Rico lleva años siendo asediado por buitres que quieren explotar nuestros recursos y nuestra mano de obra a cambio de migajas, mientras vacían el archipiélago para construir un paraíso para unos pocos. Si bien los gobiernos corruptos e incompetentes cargan con la culpa de habernos traído a donde estamos hoy y de vender a nuestro país al mejor postor, no podemos olvidar que es la Junta no electa, repleta de banqueros y grandes empresarios igualmente corruptos e incompetentes, la que tiene la última palabra en cuanto al destino de Puerto Rico. Hay que recordar que, aunque no se dejó ver para nada útil tras el desastre provocado por María, la Junta es la que continúa gobernando a Puerto Rico de forma dictatorial y ajena al bienestar de la mayoría, y por eso seguiremos señalando y exponiendo sus intenciones nefastas”, opinaron.
Sin embargo, los portavoces dejaron claro que no tienen intención alguna de defender la AEE que existe actualmente. “No podemos defender un mal para evitar otro. Estamos hablando de la AEE que continúa dependiendo de combustibles fósiles, que reparte contratos y empleos a los amigos de políticos, que echó a perder su infraestructura, que es más cara a medida que empeora el servicio, que tardó semanas en solicitar asistencia para reparar el sistema y que hoy mantiene a cientos de miles a oscuras. No podemos defender a administradores y gobiernos que han sido incapaces de proteger y hacer el mejor uso de nuestra propiedad, pero sí vamos a luchar por nuestra infraestructura, la cual hemos pagado con el dinero, esfuerzo y trabajo del pueblo, y la cual necesitamos que comience a funcionar para nuestro beneficio”, expusieron.
Según la Jornada, el pueblo se debe convertir en el dueño real del sistema eléctrico. “Hay grupos y comunidades que están proponiendo formas de organizar la producción de energía de forma más justa y descentralizada. Aunque es necesario, no estamos hablando solo de integrar nuevas tecnologías y hacer la transición urgente a fuentes de energía renovable, sino cambiar además la forma en que se administra la propiedad pública. Proponemos su democratización convirtiéndola en un verdadero bien común en manos de la mayoría, distribuido entre nuestras comunidades, y manejado por todos y todas para el beneficio del país. Ello requiere la organización y alianza de trabajadores y trabajadoras, comunidades y otros sectores solidarios para verdaderamente apropiarnos de lo que es nuestro”.