El exprisionero político Oscar López Rivera se encuentra disfrutando de sus primeras Fiestas de la Calle San Sebastián tras cumplir 35 años de prisión federal por conspiración.
“La celebración es absolutamente necesaria porque la alegría juega un papel importante en la gente. Debemos celebrar todos los momentos en la vida que podamos y más en momentos como ahora”, expresó López Rivera.
Hace un año el presidente estadounidense de aquel entonces, Barack Obama, conmutó la sentencia del prisionero político quien pasó unos 12 años en confinamiento solitario.
“Esto nos ofrece la oportunidad de desahogarnos, de relajarnos un poquito, de sacarnos de todos esos sufrimientos que este pueblo ha experimentado”, manifestó el natural de San Sebastián.
Y es que estas son las primeras “SanSe” luego del azote de los huracanes Irma y María. Al día de hoy, según las cifras oficiales del gobierno, un 30 % de los abonados aún no cuentan con servicio de energía eléctrica.
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“La situación es una triste. Para mí, tanto el gobierno federal como el de Puerto Rico, ha hecho un trabajo bien miserable. Un trabajo que le falta el respeto al pueblo y le viola los derechos más fundamentales que tiene el ser humano. Es bien deshumanizante”, opinó.
López Rivera ha pasado sus últimos 60 años fuera de Puerto Rico.
El líder independentista aseguró que se ha disfrutado las tradicionales fiestas y que ha podido “apreciar la creatividad de los puertorriqueños”.
“La dimensión cultural es esencial si queremos un Puerto Rico donde el recurso humano –que es el principal– pueda realmente disfrutar de la vida”, puntualizó.