Adjuntas está sin agua potable y comida, esa es la emergencia más grande que enfrenta en este momento el municipio luego del paso del huracán María, según dijo el alcalde Jaime Balducea a Metro.
“El generador del acueducto se dañó, así que para el uso de los baños, bañarse se nos está complicando y no tenemos comida tampoco”, detalló el ejecutivo municipal.
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Al tiempo, dijo que luego de suscitarse varios escalamientos, han desarrollado una estrategia especial para que la Policía pueda dar seguridad al pueblo, aunque haya falta de comunicación.
Sobre las carreteras, mencionó que hay acceso al pueblo tomando la ruta de Ponce, a través de las carreteras estatales. No obstante, las vías “terciarias tendrán que esperar”.
De otra parte, mencionó que no hay paso para el municipio de Utuado transitando por Adjuntas.
En el pueblo aún tienen 175 refugiados y unas 1,500 casas fueron pérdida total por el paso del huracán María.