En espera de la firma del gobernador se encuentra una medida, de la autoría del presidente de la Cámara de Representantes, Carlos ‘Johnny’ Méndez Núñez, la cual establecería un Comité Asesor de Reciclaje con el propósito de ofrecer a la Asamblea Legislativa y al Ejecutivo la inteligencia científica necesaria para atender con precisión los problemas relacionados incluyendo los aspectos de producción, distribución, disposición y reciclaje, trascendió el lunes.
“El Gobierno tiene como política pública el desarrollo e implantación de estrategias económicamente viables y ambientalmente seguras que resulten en la disminución del volumen de desperdicios sólidos que requerirá disposición final. Como parte de estas estrategias, esta Asamblea Legislativa reconoce que es necesario establecer el aparato regulador adecuado para evaluar, supervisar y asesorar a los establecimientos del programa de reciclaje radicados en los establecimientos comerciales, a fin de promover el manejo adecuado por parte de la ciudadanía y reducir así el impacto al medioambiente que conlleva”, dijo Méndez Núñez en declaraciones escritas.
PUBLICIDAD
Explicó que la medida, el Proyecto de la Cámara 725, fue aprobada el 15 de junio en la Cámara con votación de 42 a favor y 4 en contra. El Senado lo avaló el día 29, con 28 votos a favor y uno en contra.
Mencionó que desde el 2010 la Asamblea Legislativa comenzó los esfuerzos de lograr que se estableciera en Puerto Rico un programa de reciclaje. Con este propósito se aprobó la Ley 38-2010, conocida como la “Ley para la Reducción y el Reciclaje de Desperdicios Sólidos en Puerto Rico”, a fin de establecer programas de reciclaje en los establecimientos comerciales de Puerto Rico.
Esta Ley 38, supra, aplanó el camino para que adquiriéramos la experiencia necesaria para implementar el reciclaje en la Isla. Es importante que se cree una comisión consultiva, que incluya al sector industrial, comercial y los consumidores, y que pueda evaluar y recomendar reglamentación necesaria, ya que el problema del reciclaje de desperdicios sólidos: papel, cristal, plástico, aluminio y otros metales, es complejo y no debe limitarse a la prohibición y a los impuestos como mecanismos de manejo. Es necesario crear un constante y dinámico método de fiscalización y colaboración para lograr los objetivos de la Ley 70.
“Durante el proceso de desarrollo y promulgación de reglamentos existió falta de coherencia en su integración con las leyes y reglamentos existentes de desperdicios sólidos. Una política improvisada no es buena para el ambiente ni para la salud de la comunidad. Por eso es importante establecer protocolos de manejo para el reciclaje y usos reusables, pues se trata de asegurar que no se desarrollen otros problemas de salud. En Puerto Rico hemos sufrido graves consecuencias de las enfermedades causadas por las picadas de mosquitos, tales como el Zika y el Dengue, las cuales han provocado la cancelación de eventos turísticos internacionales en la Isla. La probabilidad de añadir epidemias relacionadas con la contaminación de alimentos no puede ser descartada livianamente. Además, puede tener impactos negativos para el desarrollo económico cuando puede poner en peligro la industria turística”, lee parte de la Exposición de Motivos de la medida.