CANBERRA, Australia – Australia suspendió el martes los ataques aéreos contra objetivos del grupo extremista Estado Islámico en Siria como medida de precaución, después de que un avión de combate de Estados Unidos derribara a uno sirio a principios de semana y Rusia advirtiera a la coalición que lidera Washington que no volara sobre posiciones del ejército sirio al oeste del río Éufrates.
Canberra anunció su decisión el mismo día en el que colapsaba una breve tregua de dos días en la ciudad sureña de Daraa y sus alrededores, donde las fuerzas del gobierno han ganado terreno.
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Australia forma parte de una coalición encabezada por Estados Unidos contra milicianos del grupo extremista Estado Islámico en Siria e Irak.
El ejército estadounidense derribó el caza sirio el domingo alegando que había atacado a un contingente aliado, una fuerza de liderazgo curdo que lucha contra los extremistas del grupo EI en su capital de facto, Raqqa.
Eso hizo que Rusia, estrecha aliada del presidente de Siria, Bashar Assad, advirtiera de que atacaría las aeronaves de la coalición que encabeza Washington que volaran al oeste del Éufrates.
En otro suceso sin precedentes, Irán _también estrecho aliado de Assad_ lanzó misiles balísticos a objetivos del grupo EI en la provincia de Deir el-Zour, en el este de Siria, más tarde el domingo. La Guardia Revolucionaria iraní describió el ataque como una represalia por los ataques de la milicia radical en Teherán este mes, en los que hubo al menos 18 muertos y más de 50 heridos.
“La protección de la Fuerza de Defensa australiana se revisa regularmente en respuesta a una serie de potenciales amenazas”, explicó el Departamento de Defensa en un comunicado desde Canberra.
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Australia tiene seis cazas con base en Emiratos Árabes Unidos para atacar a objetivos radicales en Siria e Irak.
El lunes, al día siguiente de que se derribara el avión sirio, Rusia amenazó a las aeronaves de la coalición liderada por Washington en el espacio aéreo controlado por Siria y suspendió una línea directa para evitar colisiones en un espacio aéreo cada vez más abarrotado.