De cara a una vista de desacato por no cumplir una orden judicial que le conminó a abrir los portones del Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico “no más tarde” del día de hoy, la rectora interinaCarmen H. Rivera dijo que trató y no pudo.
Sus esfuerzos se centraron en no faltarle al respeto a nadie y sin violencia. La vista de desacato se verá este martes en el Centro Judicial de San Juan.
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En declaraciones emitidas esta noche, Rivera Vega dijo que “durante el día de hoy realizamos múltiples intentos por abrir los portones del Recinto. Los mismos transcurrieron con el mayor grado de respeto, sosiego y sin violencia. En estos intentos participaron personal de Rectoría, personal administrativo, profesores, Decanas, personal no docente, oficiales de seguridad, así como miembros de la Junta Coordinadora de Seguridad, entre otros”, aseguró.
Añadió que “cónsono con el cumplimiento de nuestra política sobre convivencia, participaron como observadores la Comisión de Derechos Civiles, el Colegio de Abogados y Abogadas, Amnistía Internacional, American Civil Liberties Union y religiosos de varias congregaciones, entre otros”.
“En nuestras intervenciones, hemos requerido el acceso para la apertura total del Recinto y continuar las labores académicas, así como el acceso de personal administrativo para reacondicionar el campus”, afirmó.
Hoy, como desde hace un mes, sectores estudiantiles tomaron posesión del interior del campus y nadie entra sin la autorización de los estudiantes. Una orden judicial obligó la apertura.