Todo el poblado de St. George en el condado más sureño de Georgia se encuentra bajo orden de evacuación obligatoria emitida el sábado después de que un incendio forestal en el pantano Okefenokee comenzó a avanzar hacia propiedad privada.
La comunidad no incorporada al gobierno municipal tiene unos 2.000 habitantes. La evacuación abarcó inicialmente una zona rural escasamente poblada del condado Charleton, desde la avenida Jim Crawford Loop hacia el sur hasta St. George, en la parte oeste de la carretera 121.
El administrador del condado, Shawn Boatright, se abstuvo de precisar el número de habitantes que serían afectados en esta última zona.
El incendio comenzó con un relámpago que cayó el 6 de abril y desde entonces ha destruido más de 389 kilómetros cuadrados (150 millas cuadradas) de tierras públicas.
Las llamas han estado activas en el último mes casi principalmente en el perímetro del refugio natural de Okefenokee _y en parte de un bosque de tierras públicas en el norte de Florida_, pero el viernes rebasaron los cortafuegos alrededor del refugio y han destruido 404 hectáreas (1.000 acres) de tierras privadas, según cálculos.
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El área, en la frontera entre Georgia y Florida, también está bajo una alerta de humo denso, porque previsiblemente afectará la visibilidad en las localidades de St. George, Callahan, Ratliff y el condado Duval, al norte, cerca del aeropuerto internacional de Jacksonville.
Se abrió un albergue temporal en el gimnasio de la escuela primaria Folkston. Boatright dijo que el lugar estará abierto de manera indefinida.
“No estamos seguros de qué va a suceder ahora, así que permanecerá abierto hasta nuevo aviso”, agregó.
Boatright pidió a las personas que traigan sus objetos personales que pudieran necesitar para una permanencia larga en el lugar.