Una empleada que labora en el municipio de Guaynabo por más de 16 años denunció a Telenoticias el “patrón de hostigamiento” al que se ha enfrentado por años y el cual ha elevado a varias dependencias gubernamentales mediante varias querellas.
La abogada Lilliam Roy, quien actualmente ocupa la segunda posición en la División Legal del municipio de Guaynabo, reveló a la periodista Ivette Sosa que “para mí es un sufrimiento levantarme diariamente para ir a trabajar en el municipio, porque él avála todo hostigamiento, toda la represalia. Él avála todo maltrato”.
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En 2009, la abogada radicó una querella en la Comisión para la Igualdad de Oportunidades en el Empleo (EEOC), tras intensificar un patrón de malos tratos y atropello en su ambiente de trabajo.
“El que haya un jefe con una secretaria o con otra empleada, eso es normal en todos los departamentos”, sostuvo la empleada.
También indicó que el alcalde de Guaynabo Héctor O’Neill “no ha renunciado, pero él sabe todo lo que ha ido pasando”.
De acuerdo con la licenciada, al momento de quejarse con las agencias pertinentes sobre las conductas ilícitas, no le asignaban tarea o la llenaban de exceso de trabajo. Tras estos incidentes, la fémina ha sido trasladada a varias dependencias municipales como el departamento de Vivienda en Guaynabo.
Estando en esta oficina, indicó que la vicealcaldesa quiso llegar a una acuerdo con ella mediante resarcimiento económico, sin embargo la licenciada notificó que lo que quería era que no le hicieran daño, por lo que la movieron a la división legal.
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Ante tales efectos, la empleada confesó que eventualmente enfrentó episodios de ansiedad y ataques de pánico.
En la entrevista la licenciada habló sobre el caso del hijo del alcalde, entre otros casos de hostigamiento sexual ocurridos entre jefes y empleados del municipio.
La entrevistada mantiene un caso activo. La empleada asegura que si continúa trabajando con el municipio es “porque las conexiones de O’Neill son tan grandes que tú tratas de buscar trabajo en otro sitio y no consigues”.
