El gobernador Ricardo Rosselló Nevares dejó la puerta abierta el miércoles, para que aquellos pensionados que reciben unas cantidades mayores a la promedio de 400 a 600 dólares mensuales, sufran un recorte como parte del Plan Fiscal.
“Estamos hablando de los más vulnerables, los que tienen las pensiones más bajas, los que hoy día tienen dificultad para comprar sus medicinas, a los que bajarle un 10 por ciento sería esencialmente tirarlos a la pobreza, al igual que lo discutimos en el asunto de la Universidad de Puerto Rico, aquellos que tengan más capital en áreas como esta, deberán aportar más en esta situación fiscal. Nuestro objetivo es que el Sistema de Retiro no colapse”, dijo Rosselló Nevares a preguntas de la prensa.
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“Todo está sujeto a ver cuán grande es el problema, pero ciertamente, aquellos que tengan más deben aportar más”, añadió.
Supuestamente menos del dos por ciento de los pensionados de Puerto Rico reciben compensaciones mayor a las promedio, entre otros, alcaldes, legisladores y funcionarios de gobierno que han tenido puestos gerenciales.
