Portavoces de organizaciones dedicadas a asistir a mujeres en situaciones de violencia y de la comunidad lésbica, gay, bisexual, transgénero y transexual (LGBTT) levantaron bandera sobre ciertas medidas que cambiarían la Ley 54 de Violencia Doméstica.
La portavoz de la organización Matria, Amárilis Pagán, especificó que “los resultados de las enmiendas se tendrían si los funcionarios hicieran su trabajo sin prejuicio y de manera eficiente. La Ley 54 ya trabaja con la relaciones paternofiliales con órdenes de protección”. Además, dijo que se parte de la premisa de que “las muejres mienten”, mientras dijo que, en ocasiones, las órdenes se retiran porque “se sienten desprotegidas ante el sistema”.
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Por otro lado, el activista de derechos humanos Pedro Julio Serrano advirtió que “cualquier cambio que sufra la Ley 54 tiene que tener en cuenta esta realidad y no eliminar ningún derecho adquirido”.
“Estaremos muy alertas a la radicación de cualquier enmienda para asegurarnos de que las personas LGBTT sobrevivientes de violencia doméstica estén protegidas”, enfatizó Serrano.
