El grupo Ateístas de Puerto Rico denunció una violación a la separación de iglesia y estado en el municipio de Gurabo y presentaron querellas ante la Oficina de la Contralora y la Oficina de Etica Gubernamental, se informó hoy.
Los ateístas indican que someten el recursos en representación de la comunidad secular y no creyente del municipio de Gurabo.
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“Hacemos constatar la violación a los preceptos de separación de iglesia y estado que cobija nuestra constitución por parte del gobierno municipal del mencionado municipio, donde evidentemente se han utilizado recursos del estado para organizar una actividad de índole religiosa para la denominación cristiana”.
El colectivo afirmó que la acaldesa Rosachely Rivera Santana firmó el pasado viernes un decreto para celebrar una activiadd eminentemente religiosa.
“Es por ello que hoy 1 de febrero radicamos una querella a la Oficina de Ética Gubernamental y la Oficina del Contralor para que se investigue esta malversación de fondos públicos en una actividad que es totalmente ilegal y se presta para favorecer una denominación religiosa por encima de las demás”, se explicó.
APR también criticó que supuestamente el pasado 19 de enero la Alcaldesa utilizó el salón de la Legislatura Municipal en el tercer nivel,ubicado en la alcaldía del municipio, para coordinar el evento, al que solo fueron invitados líderes de la denominación religiosa cristiana de una iglesia específica y excluyendo otros grupos religiosos y denominaciones.
El documento firmado por la ejecutiva municipal decreta 40 días de ayuno y oración, que comenzó este martes 31 de enero y se extenderá hasta el 11 de enero en el coliseo municipal de Gurabo.
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“Tan siquiera la alcaldesa para disimular el mal uso de fondos públicos para una actividad cristiana que según ellos es de ‘base comunitaria y de fe’ tuvo la gentileza de invitar a otros grupos comunitarios a participar de la reunión para organizar el evento”, señaló Shirley Rivera, presidenta de Ateístas de Puerto Rico.
Esta se refirió a otros grupos no solo “bautistas o evangélicos, me refiero a grupos musulmanes, humanistas, ateos, yorubas, judíos, pastafarianos, hindúes, budistas o agnósticos que también forman parte de la ciudadanía y son excluidos de estas actividades organizativas ‘comunitarias’ una y otra vez”, declaró.
El secretario legal de la organización, Joel López Bou, dijo por su parte que estará pendiente “a que se investigue tal acto, ya que afecta a contribuyentes en dicho municipio pues se están utilizando fondos públicos para planificar, promover y llevar a cabo una actividad inconstitucional que no tiene propósito secular que beneficie a todos los gurabeños. De continuar con estas prácticas nos veremos en la obligación de llevar el caso a los tribunales”.
Ateístas de Puerto Rico es una organización, sin fines de lucro, de activismo ateo, por el que ellos entienden como la promoción del pensamiento anti-teísta y anti-religioso, en función de la promoción y preservación del secularismo (separación de iglesia/estado), y de la libertad religiosa y de pensamiento.
“Entendemos que la religión organizada y la creencia en deidades tiene un efecto negativo, tanto sobre el desarrollo intelectual y moral del individuo, como sobre el desarrollo social y la implantación efectiva de los derechos humanos. Un pueblo laico es la meta para garantizar los derechos de la sociedad en general”, se reveló.
