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Estampas de familias enteras caracterizaron la Cuadragésima Colación de Grados de la Universidad de Puerto Rico (UPR) en Carolina en la que muchos jaguares gigantes celebraron el logro y su alegría se reflejó en creativos birretes, vítores y sonrisas por doquier.
La Clase 2016 tuvo 536 graduandos, 472 a nivel de bachillerato y 64 en grado asociado. Durante la ceremonia, que tuvo como escenario el majestuoso Teatro del Recinto de Río Piedras, se otorgaron los Premios del Rector a los estudiantes con el promedio más alto de la clase y se reconocieron a los promedios más altos por programa académico.
Los Premios del Rector recayeron -a nivel de bachillerato- en las estudiantes Sofía Portela Tirado, de Administración de Hoteles y Restaurantes y Kariana Rodríguez Rosado, de Ciencias Sociales en Justicia Criminal, con énfasis en Psicología Forense. Mientras, a nivel de grado asociado, se le concedió a Rafael Rivera Pérez, de Tecnología en Ingeniería Mecánica.
“La formación académica que han recibido en esta, su institución, les ha requerido esfuerzo, compromiso y voluntad para que, pese a los problemas familiares y pese a los problemas económicos que afectan tan directamente el proceso de aprendizaje, hayan tenido la valentía, la persistencia y el coraje necesarios para lograr sus metas”, declaró en su mensaje a los graduandos, la decana de estudiantes, profesora Nitza Ávila.
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“Queridos estudiantes, el éxito en cualquier contexto es como una majestuosa torre porque requiere ahondar mucho en sus cimientos, que son, en este caso, la confianza en ustedes mismos, la disciplina y la devoción para servir”, expresó Ávila antes de cederle el espacio al rector.
Mientras, el rector de la institución, doctor Moisés Orengo Avilés, concentró su discurso titulado ‘Encuentra tu pasión: Un sueño posible’, en presentar un nuevo ángulo a los estudiantes para alcanzar sus anhelos. “En estos días escucharán muchas exhortaciones a soñar lo imposible, a hacer lo imposible. Hoy les presento otro ángulo, una nueva propuesta. Les propongo el sueño posible, el sueño práctico. Para dar con ese sueño posible hay que encontrar primero nuestra verdadera pasión”, sostuvo.
Pasó entonces a mencionar con el ejemplo a varios estudiantes que han hecho, desde la universidad, “su sueño posible”. Así mencionó a docenas de graduandos que se convirtieron en empresarios, en fundadores de organizaciones, ganadores de certámenes de diseño o culinarios, entre otros, demostrando el gran potencial de los estudiantes.
Mientras, el presidente de la UPR, Uroyoán Walker Ramos hizo un recuento de los logros en el recinto de los jaguares.
“Jaguares de la Universidad de Puerto Rico en Carolina, qué mucho hemos adelantado en su casa, enclavada en la Tierra de Gigantes; qué mucho han aportado ustedes y sus docentes en proyectos que han trascendido las fronteras del recinto, ¡Qué orgullo siento al verlos aquí, listos para iniciar el siguiente viaje. A ustedes, los 536 jaguares que hoy saldrán a comerse el mundo, les agradezco por haber seleccionado a la Universidad de Puerto Rico como su hogar, como la institución para moldearlos y ayudarlos a descubrir cuál era su misión de vida. ¡Ahora vayan a demostrar su cría, conservando el vínculo con su Universidad! ¡Demuestren que son y serán, Jaguares siempre!”, manifestó.
En términos de los premios por promedio esta clase ostenta 10 Suma Cum Laude, 50 Magna Cum Laude y 76 Cum Laude.
La UPR-Carolina concedió grados de bachillerato en las disciplinas de Administración de Hoteles y Restaurantes, Artes Gráficas, Publicidad Comercial, Finanzas, Gerencia, Ley y Sociedad, Psicología Forense, Sistemas de Oficina, Cultura Turística, Educación Ocupacional y Educación en Tecnología. Los grados asociados fueron en los programas de Instrumentación y Sistemas de Control, Diseño de Interiores, Educación Física Adaptada, Ingeniería Mecánica, Tecnología Automotriz y Pedagogía.
Por segundo año consecutivo los graduandos recibieron sus diplomas, justo después de la ceremonia de graduación.