Lorenzo Servitje, uno de los fundadores de la empresa Bimbo, la panificadora mexicana fundada hace 71 años y que se convirtió en uno de los líderes mundiales del sector, murió el viernes a sus 98 años.
El presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Juan Pablo Castañón, informó de su fallecimiento a través de su cuenta oficial de Twitter pero no dijo la causa de la muerte.
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Servitje nació en la Ciudad de México en una familia de inmigrantes catalanes que abrió una pastelería en la capital, un negocio en el que empezó a trabajar cuando tenía 16 años en sus ratos libres y del que se encargó a partir de 1937 cuando su padre murió de manera repentina.
Estudió para contador público en la Universidad Nacional Autónoma de México pero su vida estaría marcada por la panadería y la bollería, el sector que encumbraría a su familia a nivel mundial.
En 1945, con cuatro socios más, fundó la panificadora Bimbo, conocida por el osito que se convirtió en su logotipo, con sólo 38 colaboradores, entre ellos su hermano Roberto, una marca y cuatro productos.
Hoy Bimbo es una multinacional con 130.000 colaboradores que opera en 22 países, produce más de 10.000 productos con cien marcas distintas y un volumen de ventas que en 2015 alcanzó los $13.818 millones.
