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¡No se preocupen! La era de los zombies aún no llega. Lo que sí está pasando (y desde hace muchos años) es una rareza, mejor conocida como el Síndrome de Cotard o Síndrome del Cadáver Ambulante.
Esta enfermedad psiquiátrica hace creer a las personas que han muerto. Incluso hay casos de pacientes que sienten como sus órganos están en estado de putrefacción, delirando en ocasiones el olor a podrido. Estas personas afirman que todos a su alrededor también murieron y se encuentran en una etapa transitoria entre la vida y el descanso eterno.
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El padecimiento fue descubierto por el neurólogo francés Jules Cotard, en 1880. El primer caso que se presentó fue el de una paciente denominada Mademoiselle X, quien aseguraba que se encontraba en el limbo y no podía entrar al cielo ni al infierno.
La misma mujer de 43 años afirmaba que su cerebro, nervios, pecho, estómago e intestinos habían desaparecido de su cuerpo, dejando los huesos y piel en descomposición. Además de sentirse condenada a no morir de forma natural, por lo que creía que sólo quemando su cuerpo sería salvada.
Estos son algunos casos recientes de este padecimiento:
En 1996 un motociclista escocés sufrió un accidente con lesiones en la cabeza; posterior a esto, comenzó a creer que había muerto, su condición empeoró cuando se mudó a Sudáfrica y relacionaba el calor del lugar con el infierno.
En 2003, un paciente creía que su cerebro había desaparecido. Esto lo llevó a intentar suicidarse y aunque no recibió tratamiento, años después, afirmaba que había nacido sin mente y por eso era retrasado.
En el año de 2005 un hombre llegó a un hospital Iraní afirmando que él, su esposa y tres hijas habían muerto. Ademas de asegurar que él había reencarnado en perro y ellas en ovejas. Este hombre fue diagnosticado del Síndrome de Cotard y Licantropía Clínica.
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