La estrategia de Shakira para evadir impuestos en España.
Un artículo de El País de España genera escándalo en el mundo musical de Iberoamérica.
Shakira vuelve a estar en el ojo del huracán por cuenta de los impuestos que no ha cancelado a Hacienda en España.
Y es que el artículo revela que la cantante barranquillera ha defraudado a Hacienda en más de 14 millones de euros y lo ha hecho escudada en que no vive en Barcelona.
Sin embargo, una investigación de una inspectora dio con la reconstrucción de la vida de Shakira en los últimos años y reveló que sí vivió en Barcelona y que ha esquivado sus cuentas fiscales.
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La estrategia de Shakira para evadir impuestos en España:
“Hacienda concluye que Shakira defraudó en el impuesto de IRPF y patrimonio durante cuatro años. Su año de más ingresos, 2011, después del exitazo del Mundial y con la gira mundial en marcha, no pudo llevarse ante la justicia porque había prescrito. Se cerró con un acta de desacuerdo: la cantante pagó 24 millones de euros (la cuota defraudada) para regularizar antes de reclamar ante la Agencia Tributaria”
Sin embargo, lo más grave, es que la artista estaría al frente de empresas fachada en paraísos fiscales para evadir impuestos.
La inspectora encontró los recibos de peluqueros, de doctores, de compras en el Corte Inglés, de estética y de entrenadores que sirvieron para ella en España, a pesar de que dice que no es cierto.
“Las tarjetas de crédito también han sido esenciales. Su hermano Antonio ―que Shakira identificó en la inspección como “coordinador de los equipos de seguridad”― y tres asistentes de la cantante gastaron, en cuatro años, la friolera de 418.046 euros en 279 establecimientos de Barcelona. Los pagos corresponden a servicios que usaban ellos (residentes, en teoría, en Estados Unidos), pero sobre todo la cantante: restaurantes, farmacias, taxis, hoteles; entre otros, para Anna Kieser, la entrenadora que “la puso en forma tras el embarazo”, detalla el informe. Un documento de pago del hotel Santo Mauro de Madrid, abonado con la tarjeta de una colaboradora, señala literalmente: “Lo paga Shakira””.
Entre las cosas más graves se revela que la mujer habría dicho mentiras sobre su lugar de residencia, que según ella era en las Bahamas, pero esta casa solo sería una fachada.
“La disputa en la sede de la Agencia Tributaria fue intensa. Shakira aportó gastos de luz, agua y televisión por cable de la casa de Nassau. Resultó que esos servicios los pagaba una empresa y no los consumía ella, sino los empleados que cuidaban la finca”, asegura El País.
La investigación da cuenta de una estrategia para defraudar al estado y no responder con impuestos, a pesar de que la artista es multimillonaria.