Salma Hayek impactó con su llegada a los Globos de Oro el pasado 5 de enero al lucir un ajustado atuendo Gucci con revelador escote que hacía lucir a la actriz más sensual que nunca.
Aunque sus fanáticos la llenaron de elogios al verla caminar impecable por la alfombra roja, para otros la opción estuvo mal, pues consideraban inadecuado para el evento tal exhibición de sus atributos.
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Sin embargo, Salma no se deja apabullar por el revuelo ocasionado y no dudo en contestar con buen humor y simpatía a las críticas durante el estreno de su nueva película “Like a Boss”. Además, en sus declaraciones develó de dónde proviene su “pechonalidad”.
“Me siento bien. Tengo 53 años, ¿por qué no? La verdad es que he subido mucho de peso y ahí es donde se me va. No hubo arreglo, pero voy a bajar de peso y todo volverá a la normalidad, mi espalda no está contenta”, contó.
En cuanto a la decisión del vestido, la celebridad reveló que fue porque prefiere “verse sexy que gorda”.
“A veces hay que ponerse cosas que se ven como demasiado sexy, pero si no te pones eso, te ves gorda, entonces prefiero verme sexy que gorda”, confesó la mexicana durante una entrevista Al Rojo Vivo.
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Salma Hayek destaca en los Globos de Oro
Su atractiva figura no fue lo único con lo Hayek capturó la atención. La nacida en Coatzacoalcos, Veracruz, también encantó a sus seguidores con las fotografías de la gala que compartió.
La artista posó con Pedro Almodóvar, Quentin Tarantino, Antonio Banderas y su amiga Patricia Arquette durante el evento.
“Estoy muy orgullosa de mi amiga Patricia Arquette, que dio dos de las mejores actuaciones este año en TV”, escribió en la descripción de una de sus publicaciones en Instagram.
