La actriz Taylor Hickson está demandando a la compañía Incidente Productions Inc. Por una lesión que sufrió mientras filmaba “Ghostland”.
La joven de 20 años afirma que el accidente que tuvo en el set ha dañado su carrera, pues le desfiguró su rostro.
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Taylor hizo su debut en la película “Deadpool” que protagoniza Ryan Reynolds, desde entonces recibió numerosas ofertas.
¿Qué sucedió?
Según medios estadounidenses, a la actriz le ordenaron que golpeara contra una puerta de vidrio durante una escena para la película de terror.
Pascal Laugier, director de la cinta, dijo que la escena era segura, pero cuando ella rompió el vidrio con su puño los pedazos rotos cayeron sobre su cara.
Fue llevada al un hospital y la herida de la mejilla requirió más de 70 puntos.
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En unas fotos que ella misma ha publicado en sus redes sociales, se aprecia la cicatriz, y para que no queden dudas la firma que la representa compartió fotos del día del accidente.
Las consecuencias
La demanda señala que la actriz iba en ascenso antes del accidente, y que ahora batalla para conseguir papeles debido a la cicatriz.
Ella afirma sentirse insegura debido a la lesión, también ha experimentado confusión, dolor, rabia y tristeza debido a la falta de previsiones de la productora.
Sus abogados indican que la compañía no cumplió con los estándares legales de cuidado con ella, y que el incidente pudo prevenirse.
