Las autoridades de Japón señalaron el jueves que pondrán fin a un estado de emergencia que duró meses en el área de Tokio y el cual fue establecido para frenar la propagación del coronavirus, pese a las preocupaciones de que la temporada de fiestas en primavera y el traslado de relevos de la antorcha olímpica programado para la próxima semana puedan causar un rebrote.
Se prevé que las medidas de emergencia sean levantadas el domingo, anunció el primer ministro Yoshihide Suga durante una reunión con el cuerpo especial formado por el gobierno japonés.
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La decisión subraya el afán del gobierno de reducir la presión económica de los negocios y mantener activa la economía. Sin embargo, algunos expertos advirtieron que si bien Tokio ha logrado reducir los índices de nuevos contagios, el declive se ha estabilizado y podría rebotar.
Las medidas cautelares después del fin del estado de emergencia serán cruciales, destacó Shigeru Omi, un médico que forma parte del panel del gobierno conformado por expertos en el coronavirus.
“Debemos evitar un rebote de contagios. Debemos evitar sobrecargar a los sistemas médicos y de salud pública como antes”, dijo Omi.
Tokio y otras tres prefecturas vecinas han estado bajo medidas de emergencia desde el 7 de enero, principalmente solicitando a restaurantes y bares que cierren a las 8:00 de la noche y se tomen las medidas preventivas, así como pidiendo a compañías y empleados que realicen más trabajo a distancia. Medidas de emergencia similares fueron levantadas en seis áreas urbanas a finales del mes pasado.
