Un tribunal de apelaciones dictaminó que el mariscal de los Patriots de Nueva Inglaterra Tom Brady debe servir los cuatro juegos de suspensión que la liga impuso antes de comenzar la temporada 2015 por su rol en el escándalo Deflategate.
El mandato del tribunal de Nueva York anula la decisión de un juez que ordenó a favor de Brady y n o tuvo que servir castigo. Luego de meses de persistencia por el comisionado de la NFL Roger Goodell de que Brady debió ser castigado, la liga obtuvo el resultado que deseaban. La decisión fue dividida entre un panel de tres jueces.
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El documento como tal señaló a la destrucción del teléfono celular antes de las vistas como el asunto principal por el que se restableció el castigo. “Cualquier litigante razonable entendería que la destrucción de evidencia, relevado días antes de las primeras vistas, sería un asunto importante. Está bien establecido que la ley permite una cantidad de hechos para concluir que si un individuo destruye evidencia relevante que tenía una obligación de contribuir, lo hizo para encubrir información dañina”.
Una investigación reveló que Brady “probablemente estuvo involucrado” en el asunto de balones desinflados en la victoria del partido de campeonato de la Conferencia Americana (AFC) en enero 2015 contra los Colts de Indianápolis. Se determinó que los balones no estuvieron inflados al nivel requerido por la liga y los empleados de propiedad fueron despedidos, Brady fue suspendido y los Patriots de Nueva Inglaterra perdieron su turno de primera ronda del sorteo de nuevo ingreso.
Los cuatro juegos que Brady se perderá son: en los Cardinals de Arizona (11 de septiembre), contra los Dolphins de Miami (18 de septiembre), contra los Texans de Houston (22 de septiembre) y contra los Bills de Buffalo (2 de octubre). Brady podrá regresar para la quinta semana de la temporada, cuando los Patriots visiten a los Browns de Cleveland el próximo 9 de octubre.
