Latitud perfecta

Qué ver en Helsinki, la capital del país más feliz

A primera vista, Helsinki tiene una bella arquitectura, es una ciudad tranquila, hermosa y con mucho por descubrir caminando, y así lo pudimos confirmar. ¿Qué hicimos? Te compartimos los lugares que visitamos y que puedes recorrer en dos días:

Lo que alguna vez fue una posibilidad, se convirtió en una realidad cuando pisamos la capital de Finlandia por primera vez: Helsinki. La segunda capital más al norte del mundo, seguida de Reykjavik en Iceland, nos recibió con lluvia y por supuesto frío, pero el clima nunca nos ha detenido así que nada que nos quitó la emoción y la alegría de estar aquí. La distancia desde el aeropuerto a nuestro hotel eran unos 35 minutos y el trayecto comenzaba a cubrirse de nieve.

Emocionados, lo primero que hicimos fue salir a conocer la ciudad, comer y a mezclarlos con los finlandeses. A primera vista, Helsinki tiene una bella arquitectura, es una ciudad tranquila, hermosa y con mucho por descubrir caminando, y así lo pudimos confirmar. ¿Qué hicimos? Te compartimos los lugares que visitamos y que puedes recorrer en dos días:

1. Catedral de Helsinki: Esta belleza sobresale en la ciudad, no solo por su admirable color blanco y arquitectura y ubicación, si no por las escaleras que parecen elevarla. Queda en la Plaza del Senado. Un dato histórico y curioso, es que la inspiración para la construcción de esta iglesia fue la Catedral de Isaac en St. Petersburgo, Rusia. (Mira nuestra publicación: 10 lugares para ver en un día en St. Petersburgo) Obviamente la influencia tenía que estar, pues Finlandia le perteneció a Rusia. La catedral es imponente.

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2. Catedral Uspenski: Si bien quedamos enamorados con la Catedral de Helsinki, cuando seguimos caminando para la de Uspenski, también nos quedamos como wao. Tan diferente pero hermosa la también conocida como la catedral rosa. La entrada es gratis y por dentro también es todo un espectáculo. El camino para llegar a esta catedral también es hermoso, entre el muelle y la ciudad.

3. Soumenlinna: Es una fortaleza que une a 6 islas y se puede ir desde un ferry en Helsinki. Aquí, tienes que ir sí o sí para que te transportes en la historia, recorras sus túneles, iglesia y vecindario. A solo pasos en la capital, está el muelle del ferry que por $3 USD aproximadamente te lleva a Soumenlinna considerada Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. El trayecto es súper corto (15 minutos) y el ferry va constantemente de un muelle a otro cada 45 minutos. Aunque nuestra visita coincidió con un día nublado y con lloviznas, pudimos disfrutarnos cada rincón de este histórico lugar que también cuenta con tienditas de comida. Es como escaparse de la ciudad para un lugar más tranquilo rodeado del mar.

4. Iglesia Temppeliaukion o Plaza de Templo: Sí, esta iglesia fue hecha dentro de una piedra. Es impresionante tanto por afuera como por dentro en donde también la piedra está expuesta. La utilizan para misas y para conciertos por su acústica.

5. Estación central de Helsinki: Ha sido catalogada como la estación de tren más bella del mundo, y no era para menos. Si de lejos parece, de cerca lo es. Tuvimos la suerte de que nuestro hotel quedaba justo en la calle del al frente, así que siempre que caminábamos además de ser el punto de referencia, era una oportunidad para apreciarla. Desde esta estación que en su interior es un mundo, hay rutas hacia Rusia y obviamente nacionales. Es súper concurrida por lo que tanto adentro y en sus alrededores hay muchas personas.

6. Capilla del Silencio: Fuimos en busca de esta capilla que ya por su nombre, nos daba mucha curiosidad, hasta que la encontramos en medio de tiendas, estaciones de tren, calles y personas. Su diseño es bello, redondo y alto. Curiosos, entramos y parece como si entraras literalmente al silencio. No se escucha absolutamente nada de afuera. No tiene casi decoración y su propósito es que las personas escuchen el silencio, que mediten, se despejen, relajen y “escapen” de la ciudad aunque sea por un rato. Cuando fuimos estaban varios locales inmersos en la lectura de un libro. No se pueden tomar fotos a menos que tu cámara lo haga sin hacer ruido.

¡A mí me encantó! A veces es chévere desconectarse de los ruidos, ¿no crees?

7. Plaza del Mercado: El nombre lo dice todo. En el mismo centro de la ciudad hay carpas de tienditas con frutas, vegetales, flores, artículos, souveniers, entre muchos otros. Como fuimos en noviembre, cuando el frío comienza a sentirse más fuerte, no la vimos tan concurrida pero aprovechamos para llevarnos unos recuerdos de esta hermosa ciudad.

88. Ópera Nacional de Finlandia: Aunque no fuimos a ninguna función, apreciamos la arquitectura de la casa de la ópera de Finlandia que queda cerca de la bahía.

9.  El Parlamento o Eduskuntatalo: este es otro edificio que vale la pena ver por lo impresionante de su arquitectura.

Y si te queda un espacio en tu agenda, podrías no solo ver por fuera, si no entrar al Teatro Nacional de Finlandia que queda en la misma plaza de la Estación Central del tren, y al Museo Nacional de Finlandia que recorre con objetos la historia del país hasta el presente.

“Este señor me vio utilizando Google Maps y me preguntó si necesitaba ayuda. Súper amable.”

Helsinki Card

Como otras ciudades, Helsinki ofrece también la tarjeta de la ciudad que sirve como pase para diferentes lugares, uso ilimitado de transporte público, tours, descuentos, entre otros. Puedes comprarla para moverte por la ciudad con validez de 24, 48 o 72 horas. El costo varía desde $53 USD hasta $75 USD aproximadamente. Todo dependerá del tiempo que la desees y el cambio de la moneda de euros a dólares, por ejemplo. Puedes verificar todos los detalles aquí.

La capital de Finlandia es fácil de recorrer, además, el transporte público es excelente, siendo el tranvía el más común. Nosotros nos movimos siempre caminando y en el tranvía que es económico ($5 por persona por todo el día a menos que tengas la Helsinki Card) y efectivo.

Aquí en Helsinki descubrimos a su gente amable, aunque digan que son tímidos, nos trataron y se desenvolvieron muy bien. Toda la ciudad la encontramos súper linda y como fuimos a finales de noviembre, ya todo estaba decorado e iluminado con luces de Navidad, lo que hacía de cada rincón, uno aún más hermoso. La seguridad es genial y en las noches puedes ver a las personas haciendo filas largas para tomar transportación publica ya sea buses, taxis o Uber… Una maravilla.

Algo que vas a notar es que la ciudad está llena de spas y de saunas, pues en el país hay entre 2 a 3 millones de saunas. A los finlandeses les fascina aparte de que forma parte de su cultura. En los meses más fríos, el sauna se alterna con chapuzones en el río  o lago congelado… como Miguel hizo en el iglú en Saariselka al norte de Finlandia. ( El sueño de dormir en un iglú en Finlandia).

Aunque dos días no son suficientes para vivir una ciudad, al menos con esta guía te puedes organizar para descubrir y explorar más lugares. Si tienes la oportunidad de visitar Helsinki, no la dejes pasar pues por algo tienen la mejor educación, son uno de los países más seguros y recientemente salió el más feliz del mundo. Te encantará.

¿Tienes en agenda Helsinki o si ya fuiste, qué te motivaría a regresar? Cuéntanos.

 

 

 

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