Hace escasamente tres semanas, durante un informe de progreso trimestral (sobre los meses de abril a junio de 2022), el director ejecutivo del Oficina Central de Recuperación, Reconstrucción y Resiliencia (COR3) Manuel Laboy aceptaba que solo un 20 por ciento de los proyectos de construcción tras el Huracán María habían sido completados. A cinco años del Huracán María, este por ciento es notablemente bajo. Las explicaciones para esta lentitud en la recuperación han sido variadas, entre ellas, las restricciones impuestas por FEMA, la obligación de fondos, los permisos, el diseño, la inflación, la falta de mano de obra, etc.
Para el año 2020, según Laboy, los fondos para estos proyectos fueron obligados. “Una cosa es obligar y otra cosa es sacar el proyecto a la calle. Del papel a la calle, es otro mundo”, dijo Laboy en aquella mesa redonda con los medios. Lamentablemente, cinco años después del Huracán María, el Huracán Fiona destapó la realidad: seguimos sin estar listos. Peor aún, es muy posible que algunos de los pocos proyectos que el gobierno central pudo hacer en cinco años se perdieron. ¿Y ahora qué?
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Demás está decir que Puerto Rico siempre estará propenso a este tipo de evento atmosférico, razón por la que resulta increíble que se cometan los mismos errores; pobre manejo de prioridades y poca efectividad en la ejecución. El gobierno central tiene que entender que cualquier esfuerzo de asignación de recursos tiene que ser asignado a municipios o dirigido a esfuerzos en coordinación con estos. Su importancia en la respuesta inmediata está más que demostrada.
Finalmente, es tiempo de encaminar un revolucionario plan de reconstrucción de nuestra infraestructura. ¡Basta de parchos! Nos toca reconstruir nuestro sistema eléctrico, acueductos, vivienda asequible, infraestructura vial, desperdicios sólidos, etc. Para esto, el país necesita voluntad y un liderato comprometido a mantener en ritmo acelerado esa reconstrucción que tanto el país necesita. Es momento de moverse del papel a la calle. A dos años del gobierno de Pierluisi esto, lamentablemente, no ha ocurrido.
