La Oficina del Asesor Especial (OSC, en inglés), una agencia independiente del gobierno de Estados Unidos, ha iniciado una investigación sobre Jack Smith, exfiscal especial que lideró las pesquisas federales contra Donald Trump, por manejo indebido de documentos clasificados y supuestos intentos de revertir los resultados electorales de 2020.
La pesquisa gira en torno a una posible violación del Hatch Act, una ley federal que prohíbe a empleados públicos participar en actividades políticas partidistas que puedan influir en elecciones. Aunque Smith ya no labora para el gobierno, la OSC evalúa si sus actuaciones como fiscal especial infringieron esa norma mientras ocupaba el cargo.
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El senador republicano Tom Cotton, aliado de Trump, fue quien impulsó la denuncia, alegando que Smith utilizó su puesto en el Departamento de Justicia para beneficiar la campaña de Joe Biden y Kamala Harris al presentar mociones judiciales en momentos sensibles del ciclo electoral. En específico, Cotton criticó que Smith presentara un escrito legal a menos de 60 días de la elección de 2024, lo que podría violar una norma interna del Departamento de Justicia sobre intervenciones cercanas al día del voto.
Smith dejó el gobierno a inicios de este año, luego de que Trump ganara las elecciones presidenciales de 2024.
La OSC, distinta a la oficina de los fiscales especiales, también se encarga de investigar represalias contra denunciantes en agencias federales. Actualmente, está dirigida de forma interina por un funcionario nombrado por Trump, luego de que el expresidente destituyera al anterior jefe de la oficina.
El Hatch Act no contempla sanciones penales, pero puede acarrear medidas administrativas como despidos o reprimendas, pero puede acarrear medidas administrativas como despidos o reprimendas. Smith no ha emitido comentarios públicos al momento.
CNN reportó que hizo una gestión de comentarios con la Casa Blanca, pero tampoco se ha emitido reacción al momento.