Pasados los dos primeros días de plazo para la postulación de candidatos para las elecciones presidenciales en Venezuela, abundaba el viernes el registro de dirigentes que rompieron con los líderes de los principales partidos de la oposición y han tenido acercamientos con el gobierno de Nicolás Maduro.
También copa la escena el llamado Gran Polo Patriótico, la alianza de partidos que apoya al gobierno socialista. En tanto, miembros de la coalición oficialista se han hecho presentes ante las autoridades electorales para registrar la candidatura del mandatario para los comicios del 28 de julio.
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Mientras, la candidatura de la opositora María Corina Machado, inhabilitada para ejercer cargos públicos, sigue en suspenso.
La víspera Machado alertó en sus redes sociales que tras más de 12 horas de comenzado el proceso de registro los dos únicos partidos políticos que la respaldan y están habilitados para postularla ante el Consejo Nacional Electoral (CNE) —la Mesa de la Unidad Democrática y el partido Un Nuevo Tiempo—, “no tienen acceso al sistema para hacerlo”.
Se espera que la inscripción de Machado, ganadora de las primarias de la oposición por más de 90% de los votos, sea bloqueada por el sistema automatizado de la autoridad electoral. Las organizaciones políticas que la respaldan se encuentran contrarreloj para postular un reemplazo y difícilmente podrán apelar cualquier decisión en su contra debido al estrecho calendario electoral.
Pese a la inhabilitación para ejercer cargos públicos por 15 años que pesa sobre ella, la ex legisladora no ha dejado de recorrer el país para promocionar su candidatura mientras la Fiscalía General ordenó la aprehensión de varios opositores, entre ellos su jefa de campaña y mano derecha, por supuestos vínculos con una conspiración para desestabilizar al gobierno.
En Venezuela la inhabilitación política es una pena accesoria que se aplica cuando existe una sentencia judicial firme. Los críticos de Maduro, entre ellos Machado, denuncian que la inhabilitación ha sido usada por años como un arma política. Sobre Machado no pesa ninguna condena judicial.
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La ingeniera industrial, de 56 años, ha prometido que oportunamente tomará la decisión correcta en medio de las presiones de líderes locales e internacionales que le piden que formalice su renuncia a la candidatura y le brinde su apoyo a un sustituto.
Los opositores Luis Eduardo Martínez, Daniel Ceballos, Juan Carlos Alvarado y Antonio Ecarri en representación de los partidos Acción Democrática (AD), Voluntad Popular (VP), el partido socialcristiano COPEI y la Alianza del Lápiz formalizaron entre el jueves y viernes sus candidaturas a la presidencia.
AD, VP y COPEI están ahora dirigidos por disidentes de la oposición luego de que el Tribunal Supremo de Justicia, que según los críticos es controlado por el gobierno, les entregó la dirección, símbolos, colores y tarjetas de esos partidos.
Maduro, proclamado el 16 de marzo como el aspirante del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), cuenta ya con el respaldo de seis partidos miembros de la alianza oficialista Movimiento Somos Venezuela.
Maduro asumió como presidente encargado en marzo de 2013 tras la muerte de su mentor Hugo Chávez, pero poco más de un mes después fue elegido en comicios para el periodo 2013-2019 y reelecto en 2018 para otro mandato en unas polémicas elecciones que fueron desconocidas por la oposición y gobiernos extranjeros, entre ellos el de Estados Unidos, que las consideraron fraudulentas. Su mandato concluye a principios de 2025.
Los candidatos, que tienen plazo para inscribirse en forma electrónica hasta el 25 de marzo, deberán esperar si su postulación es aceptada por el CNE, a cargo de organizar los comicios nacionales, estatales y municipales.
