En el marco del Día de Prevención del Fumar, Juan M. Rivera, administrador auxiliar de la División de Prevención y Promoción de la Autoridad para el Sustento del Sano Manejo de Consumo de Alcohol y Otras Drogas de la Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (ASSMCA), hizo un llamado urgente a la comunidad sobre los riesgos del “vapeo”, especialmente entre los jóvenes.
Este año la agencia hace un particular llamado a prevenir el uso de cigarrillos electrónicos, también conocidos como los vaporizadores, vapeadores o “vapes”, entre adultos y entre la población de niños y adolescentes. Pues se ha demostrado que, aunque varía la cantidad de nicotina que contienen, dependiendo la marca comercial, resultan ser perjudiciales para la salud, adictivos, y en años recientes se ha reportado un incremento en su uso, sobre todo entre los más jóvenes.
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Los cigarrillos electrónicos son dispositivos que las personas usan para calentar líquidos y obtener un vapor que se puede inhalar. Estos líquidos se adquieren en diversos sabores y tamaños. En los últimos años se ha comercializado su uso, sobre todo entre la población más joven, con campañas agresivas en redes sociales y con reconocidas figuras a nivel mundial.
“Estamos hablando de un tema crítico que afecta directamente la salud y el desarrollo cognitivo de nuestros niños y adolescentes”, declaró Rivera. “Los cigarrillos electrónicos, o beepers como se les conoce, representan una amenaza significativa debido a los compuestos químicos que contienen, especialmente la nicotina, que es altamente adictivo”, añadió.
Según las estadísticas reveladas por Rivera, extraídas de la encuesta de Consulta Juvenil XI de Puerto Rico más reciente, un total de 23,720 estudiantes de séptimo a cuarto año han experimentado el vapeo en algún momento de sus vidas. Lo que es aún más inquietante es que las cifras muestran que las jóvenes están superando a los varones en esta tendencia, con un 14.2% de mujeres que han vapeado en comparación con un 11.6% de hombres.
El estudio también reveló que la mayoría de los estudiantes, un 62%, solo vapean sabores, mientras que un preocupante 12.4% no está seguro de qué sustancias contiene el cigarrillo electrónico que han usado. Además, el 40% admitió que comenzaron a vapear porque algún amigo o miembro de la familia lo hacía, y un 32.7% lo hizo atraído por los diversos sabores disponibles, como menta, frutas y chocolate.
“Estamos hablando de una etapa crucial del desarrollo, donde el cerebro aún está en formación. El consumo de estos productos a una edad temprana puede desencadenar una adicción difícil de superar”, agregó.
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Ante esta tendencia, Rivera instó a padres, tutores, maestros y líderes comunitarios a abordar de manera urgente este tema con los jóvenes para concienciarlos sobre los riesgos asociados con el vapeo y el uso de cigarrillos electrónicos. Rivera recordó que los adolescentes son especialmente vulnerables a desarrollar adicción a la nicotina debido a su etapa de desarrollo.
Rivera ofreció recomendaciones a los padres preocupados por el uso de cigarrillos electrónicos por parte de sus hijos. “Es crucial mantener un diálogo abierto y constante con los hijos sobre los riesgos asociados con el vapeo. Además, debemos prestar atención a las amistades de nuestros hijos y buscar integrar actividades familiares que promuevan una comunicación saludable”, recomendó.
El administrador auxiliar expresó su preocupación por la proliferación de dispositivos de vapeo, muchos de los cuales adoptan formas que los hacen pasar desapercibidos como objetos comunes. “Algunos parecen juguetes o memorias USB, lo que los hace especialmente atractivos para los jóvenes y difíciles de detectar por los adultos”, señaló.
Como parte de los esfuerzos para abordar este problema, la ASSMCA cuenta con 10 Centros de Prevención en toda la isla, donde se implementan estrategias educativas para concienciar sobre los efectos nocivos del tabaco y el vapeo. Además, a través del Programa de Niños y Adolescentes, la ASSMCA ofrece servicios de tratamiento tanto en clínicas como en comunidades para aquellos jóvenes que necesitan ayuda para superar la adicción al cigarrillo y al vapeo.
Para obtener orientación o solicitar servicios, Rivera insta a los interesados a llamar de manera gratuita y confidencial a la Línea PAS de ASSMCA al número telefónico 9-8-8.