Un enfrentamiento armado entre presuntos integrantes de un grupo delictivo y agentes de las fuerzas de seguridad federales y locales dejó un saldo de tres civiles muertos y un policía herido en el sur de México, anunciaron el sábado las autoridades estatales.
El ataque ocurrió en el municipio de La Concordia, en el sureño estado de Chiapas —fronterizo con Guatemala— donde elementos del ejército mexicano, la Guardia Nacional y policías realizaban patrullajes la noche del viernes.
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La Fiscalía General de Chiapas dijo en un comunicado que fueron identificados los cuerpos de dos de los tres fallecidos, mientras que el agente estatal herido fue llevado a un hospital.
De acuerdo con el reporte de las autoridades, el enfrentamiento se presentó entre los poblados de La Tigrilla y Benito Juárez, este último donde se ubica la finca del cantante mexicano Julio César Álvarez Montelongo, conocido como Julión Álvarez, quien resultó ileso junto a su familia.
Álvarez transitaba por una carretera de Chiapas cuando se dio el tiroteo, según se informó en un comunicado del artista en el que descartó cualquier vínculo con el incidente.
En 2017 el cantante mexicano fue sancionado por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos por sus presuntos vínculos con el narcotráfico.
La Fiscalía estatal señaló que durante la operación se decomisaron vehículos, armas, cartuchos y equipo táctico.
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Los ataques a las fuerzas de seguridad en el sur de México se han hecho recurrentes en los últimos meses en medio de la cruenta disputa que mantienen los carteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación por el control del tráfico de armas, drogas y migrantes.
Apenas en noviembre un policía estatal murió en un ataque a una estación policial en el municipio de Chiapa de Corzo, y el mismo mes un militar murió y dos más resultaron heridos por un ataque armado en Maravilla Tenejapa.
En agosto fue atacada una base en el poblado de Reforma y en junio un explosivo fue lanzado a una base en la ciudad fronteriza de Tapachula casi simultáneamente con el secuestro de 16 policías estatales en Ocozocoautla, quienes fueron liberados 72 horas después de su cautiverio por parte de grupos armados.