YAKARTA, Indonesia (AP) — La Marina de Indonesia informó este jueves que empujó por la fuerza un bote con refugiados de regreso a aguas internacionales después que el barco se acercara a las costas de la provincia de Aceh.
La provincia, que forma parte de la isla de Sumatra, ha registrado un número cada vez mayor de arribos de barcos, la mayoría transportando refugiados rohinya del sur de Bangladesh.
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Un gran número de rohinya huyeron a Bangladesh en 2017 tras ataques militares contra miembros de la minoría musulmana perseguida en su tierra natal, Myanmar.
La Marina indonesia indicó que una embarcación de la guardia costera detectó el miércoles un bote que se cree que transportaba refugiados rohinya entrando en aguas de Indonesia. Posteriormente, un helicóptero de la Marina avistó un bote de madera acercándose a la isla de Weh, en el norte de la provincia de Aceh, detalló la entidad.
El buque de la Armada KRI Bontang-907 localizó al bote a unas 63 millas náuticas (72 millas) de la costa de Indonesia y lo expulsó, “asegurándose de que el bote no regresara a aguas de Indonesia”, señaló la Marina en un comunicado publicado en su sitio web.
Indonesia ha pedido ayuda a la comunidad internacional y ha intensificado los patrullajes en sus aguas debido al fuerte aumento de refugiados rohinya que abandonan los sobrepoblados campamentos en Bangladesh desde noviembre. Más de 1.500 rohinya llegaron a Aceh y se enfrentaron a cierta hostilidad por parte de sus compañeros musulmanes.
Una turba de estudiantes atacó el miércoles el sótano de un salón comunitario local en Banda Aceh, la capital de la provincia de Aceh, donde se refugiaban alrededor de 137 rohinya.
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Imágenes obtenidas por The Associated Press mostraron a un gran grupo de refugiados, en su mayoría mujeres y niños, llorando y gritando cuando un grupo que vestía chaquetas verdes universitarias fue visto rompiendo un cordón policial y subiendo por la fuerza a los rohinya en la parte trasera de dos camiones.
El incidente provocó protestas de grupos de derechos humanos y de la agencia de refugiados de la ONU, que dijeron que el ataque dejó a los refugiados conmocionados y traumatizados.
Indonesia, al igual que Tailandia y Malasia, no es signataria de la Convención de Refugiados de 1951 de Naciones Unidas, por lo que no está obligada a aceptar a los rohinya procedentes de Bangladesh. Hasta ahora, los refugiados en dificultades han recibido al menos alojamiento temporal.