Los presidentes de Venezuela, Nicolás Maduro, y de Colombia, Gustavo Petro, se reunieron en Caracas el sábado por quinta ocasión y abordaron temas de migración, cooperación energética, cambio climático y el apoyo a los diálogos de paz que lleva adelante el gobierno colombiano.
En una declaración conjunta desde el Palacio de Miraflores, el presidente anfitrión ratificó el apoyo de Venezuela “absoluto y total para hacer todo lo que haya que hacer porque el proyecto de paz total llegue más temprano que tarde a Colombia”.
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El presidente Petro aterrizó el tema y habló de la intención de crear “distritos turísticos” en la cuenca del Amazonas que beneficiarán a ambas poblaciones en la construcción de economías limpias para reemplazar a la minería ilegal.
“Sustituir esas economías ilícitas por economías lícitas no depredadoras es el nuevo nombre de la paz”, dijo el jefe de Estado colombiano.
Las negociaciones del gobierno colombiano con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional, en las que Venezuela es uno de los países garantes, atraviesan por una crisis a raíz del secuestro del padre del futbolista colombiano Luis Díaz; el padre fue liberado 12 días después de su rapto.
Petro también habló de la integración energética y afirmó que “es muy probable que Ecopetrol (estatal petrolera colombiana) se vuelva socia de PDVSA (estatal petrolera venezolana) en la explotación de gas y de petróleo”, dijo, sin ofrecer detalles.
Los presidentes también se refirieron a la propuesta colombiana para que Estados Unidos entregue un bono de estabilización que incentive a los migrantes a retornar a sus países de origen y a la cooperación para enfrentar la sequía que traerá en ciertas zonas comunes el fenómeno meteorológico de El Niño.
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Petro llegó a la capital venezolana en la mañana procedente de San Francisco, California, donde participó en la Cumbre de Líderes del Foro de Cooperación Económica de Asia Pacífico (APEC).
Como parte de su agenda oficial, el mandatario colombiano participó previamente en la Feria Internacional de Libro, donde presentó su obra “Una vida, muchas vidas”. Ahí se refirió ampliamente al conflicto armado en Oriente Medio, la crisis ambiental, el papel de la izquierda y el progresismo en América Latina.
Petro aseguró que por el “simple hecho de decir, oigan, detengan lo que está pasando en Palestina, casi me sacan del gobierno”. Calificó al primer ministro israelí Benjamín Netanyahu de “loco” y volvió a comparar la situación con “lo mismo que Hitler hizo con el pueblo judío, es decir, que estamos ante un genocidio”.
Las relaciones diplomáticas entre Venezuela y Colombia se retomaron en 2022 con el arribo de Petro al poder. Su antecesor, Iván Duque (2018-2022), había reconocido como presidente legítimo de esa nación al opositor Juan Guaidó. Los lazos bilaterales se rompieron en 2019.
