La corresponsal del i24NEWS, Nicole Zedek, reveló que en la comunidad de Kfar Aza, al sur de Israel y cerca de la frontera con Gaza, se encontraron 40 bebés y niños decapitados tras los ataques del grupo Hamás, los cuales fueron asesinados junto a sus familias dentro de sus propias casas.
“Hablando con algunos de los soldados aquí, dicen que lo que presenciaron mientras caminaban por estas comunidades son cuerpos de bebés con las cabezas cortadas y familias asesinadas a tiros en sus camas”, contó la periodista en una intervención.
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Por primera vez desde el inicio de la guerra, el ejército israelí permitió a la prensa realizar una inspección en una de las comunidades más afectadas de Israel.
Aunque no se sabe con precisión el número de víctimas, las autoridades israelís aseguran que lo ocurrido en Kfar Aza solo es una pequeña parte de las masacres de Hamás en el país de Medio Oriente, en donde continúan recogiendo cadáveres acribillados y calcinados.
Kfar Aza todavía es una zona activa, ya que los ataques de Hamás continúan, por lo que los soldados israelís siguen operando dentro de la comunidad para alertar a los pocos habitantes y a las personas de lugares cercanos para informarles sobre una nueva llegada de terroristas.
Zedek puntualizó que en la zona aún hay algunas áreas que no han sido limpiadas de explosivos, por lo que los soldados que se encargan de resguardar y rescatar los cuerpos de civiles inocentes, así como los medios de comunicación, corren un grave peligro, pues además siguen sobrevolando cohetes.
