El procurador del veterano, licenciado Agustín Montañez Allman instó este lunes, a la ciudadanía a no pasar por alto la conmemoración de las Víctimas Inocentes del Terrorismo, y reflexionar sobre el sacrificio de las vidas de soldados puertorriqueños en los teatros de guerra en Irak y Afganistán.
“Como un pueblo cristiano y de profundos valores morales, debemos hacer un alto para, en comunión con Dios, rogar para que jamás tengamos que vivir actos tan viles y despreciables y que impere la tolerancia y el diálogo entre las naciones”, aseveró Montañez Allman en declaraciones escritas.
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El procurador señaló que la conmemoración del 11 de septiembre, es solo un recordatorio de la transformación de la vida diaria de los puertorriqueños y del mundo entero, tras los ataques terroristas ocurridos hace 22 años en Nueva York y Washington, DC.
Montañez Allman, veterano condecorado por su participación como comandante de una unidad en territorio hostil en la Guerra del Golfo, manifestó que resulta imposible olvidar el dolor de toda la Humanidad, ante los ataques a instalaciones de trabajo de civiles, donde casi 3,000 víctimas inocentes sucumbieron a merced del fundamentalismo y el odio.
“Debemos hacer un acto personal de reflexión y oración por todos aquellos hermanos de diferentes nacionalidades que, lamentablemente, perdieron su vida en estos atentados. Especialmente, de aquellos héroes, como bomberos y policías, que socorrieron a otros en esta desgracia, al igual que para la paz y consuelo de los familiares de las víctimas”, puntualizó el exfiscal.
Afirmó Montañez Allman que, a raíz de los atentados, soldados boricuas han perdido la vida en la lucha contra el terrorismo, lo que impone la obligación de rendir solemne tributo a aquellos que han sacrificado sus vidas por la paz y seguridad de nuestra sociedad.
El procurador del veterano sostuvo que “como un pueblo amante de la paz, debemos asegurar que la intransigencia sectaria, la xenofobia, y la violación de derechos civiles, jamás deben echar raíces en nuestras conciencias ni en nuestro modo de vida, instando a la ciudadanía a repudiar tales acciones o comportamiento”.
“Una de las lecciones que nos brindan los ataques terroristas es que hay que mantener una actitud alerta para erradicar todo presagio de intolerancia racial o sectaria y que el espacio que brinda la libre expresión, no se convierta en un arma de odio y confrontación”, consignó Agustín Montañez Allman.