Un proyecto de ley —que nació por petición de un padre puertorriqueño— para crear La Carta de Derechos del Estudiante Encamado, en Silla de Ruedas o que hace uso de tecnología que le asiste a mantenerse con vida, avanzó hoy en la Cámara de Representantes luego de votaciones favorables a nivel de comisión.
La medida pasará a la Segunda Lectura en la Cámara, luego de ser aprobada, con enmiendas, por la Comisión de Educación, Arte y Cultura de la Cámara de Representantes, presidida por la representante Deborah Soto Arroyo. Previamente había pasado por la aprobación de la Comisión de Bienestar Social, Personas con Discapacidad y Adultos Mayores.
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Este proyecto de ley fue radicado el 24 de abril a petición de Emmanuel Medina Vázquez, de Salinas, quien era cuidador de su hija con diversidades físicas y fisiológicas complejas postrada en cama, Victoria J. Medina González.
La niña de 7 años falleció en 2022, lo que inspiró a Medina Vázquez a redactar esta medida para “lograr un cambio significativo en las vidas de estas personas tan necesitadas”. De ser aprobada, la ley también será conocida como la “Ley Victoria” en recuerdo a la hija de Medina González.
A través de dicha Carta de Derechos, “velamos por situaciones específicas para garantizar la permanencia de estos niños en el currículo regular escolar y le garantizamos los esfuerzos gubernamentales para proveerles la seguridad y atención debida, así como el eliminar cualquier posibilidad de discrimen ya sea directo o subliminal que afecte su desarrollo pleno a una educación de excelencia que asegure su futuro y el de su entorno familiar”, estipula la Exposición de Motivos.
La pieza legislativa, de ser aprobada, aplicará a los estudiantes del sistema público de enseñanza con diversidades físicas o fisiológicas complejas postrados en cama, en silla de ruedas, o que hagan uso de tecnología que los asista a mantenerse con vida, y que sean menores de 21 años.
Dicha población tendrá derecho a, entre otras cosas, recibir una preparación académica de manera presencial, y contar con herramientas para su integración en la sociedad.
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Asimismo, se permitirá que los servicios de salud en el hogar pediátrico del estudiante estén presente, con el menor, en la escuela, sin que se afecten los servicios de salud en su hogar autorizados y cubiertos por las aseguradoras contratadas por la Administración de Seguros de Salud de Puerto Rico.
Este proyecto de ley, además, propone la eliminación de cualquier tipo de barrera arquitectónica o condición peligrosa que pueda afectar a los estudiantes con diversidades físicas o fisiológicas complejas. El estudiante tendrá derecho a recibir un acomodo razonable, así como recibir asistencia médica o terapéutica de emergencia, de necesitarlo, y contar con tutores en las diferentes asignaturas.
La medida establece que cualquier persona que viole lo dispuesto en esta ley incurrirá en delito menos grave y será sancionada con una pena de reclusión por un término que no excederá de seis meses, pena de multa de entre $500 y $5,000 o ambas penas a discreción del tribunal.
De ser aprobado por la Cámara de Representantes, requerirá la aprobación del Senado y la firma del gobernador Pedro Pierluisi Urrutia para convertirse en ley.
