Agentes de Operaciones Aéreas y Marítimas (AMO, por sus siglas en ingles) de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) y la Guardia Costera de Estados Unidos colaboraron para interceptar el miércoles una embarcación tipo “yola” con tres ocupantes que transportaba 250 kilos (551 libras) de cocaína al sur de las costas de Cabo Rojo.
El valor estimado es de aproximadamente 5.2 millones de dólares.
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“Las organizaciones criminales transnacionales son implacables en sus intentos de contrabando”, dijo Augusto Reyes, director de la División Aérea y Marítima del Caribe en comunicación escrita.
“Los agentes de AMO están comprometidos a usar todas nuestras capacidades para interceptarlos en nuestras áreas costeras”, añadió.
El 29 de junio, se lanzó una Aeronave de Cumplimiento de Funciones Múltiples (MEA) de CBP para realizar una Patrulla de Seguridad Fronteriza. Cerca de la medianoche la tripulación del detectó una embarcación tipo “yola” navegando hacia el norte rumbo a Cabo Rojo.
La tripulación de CBP mantuvo la vigilancia de la embarcación para ayudar al guardacostas de Estados Unidos Joseph Doyle a interceptar.
La tripulación de la Guardia Costera encontró a bordo a 3 personas, una de nacionalidad venezolana y dos de República Dominicana, junto con siete fardos y medio con ladrillos de presunto contrabando. Los ladrillos tenían una sustancia blanca en polvo que dio positivo por las propiedades de la cocaína.
El Servicio de Investigación de la Guardia Costera de Estados Unidos tomó la custodia de los tres hombres y el contrabando para su enjuiciamiento e investigación.
