Los representantes José Rivera Madera y Ángel Matos García no les sorprende la renuncia del director ejecutivo de la Comisión de Juegos de Puerto Rico (CJPR), Orlando Rivera Carrión, y su dimisión no detendrá la pesquisa que se sigue en la Cámara de Representantes sobre la administración de la Comisión de Juegos de Puerto Rico (CJPR).
Desde hace varias semanas, los funcionarios habían solicitado al gobernador Pedro Pierluisi, destituir de su cargo al funcionario ante señalamientos de actos antiéticos que denunciaron ante la Oficina de Ética Gubernamental (OEG).
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Rivera Madera había radicado la Resolución 256, lo que dió paso a investigar señalamientos contra Rivera Carrión, luego que trascendiera que el funcionario aceptó viajes de las empresas que la Comisión de Juegos debía auditar, fiscalizar y otorgar licencias.
Según Rivera Madera, el origen de los señalamientos fue un chat en el que Rivera Carrión participaba activamente con la apariencia de discutir asuntos relacionadas a las máquinas tragamonedas que serían aceptadas por el ente gubernamental y en donde algunos de los participantes se referían al director de la Comisión como “patrón”.
“La falta de juicio, como mínimo, de Rivera Carrión podría tener ribetes antiéticos y mucho más allá, por lo que creo que lo único razonable dentro de sus decisiones ha sido el hecho de que haya renunciado”, fueron las primeras expresiones del representante popular.
De acuerdo con la información sustraída del referido chat, así como de la información vertida en las vistas de investigación en la que discutía el Proyecto 1119 de la autoría de Rivera Madera donde propone la asignación de una partida de las ganancias en esta actividad para el pago del retiro de la policía, los representante Rivera Madera y Matos García se personaron a la OEG donde radicaron una querella juramentada solicitando la intervención de este foro investigativo.
“Le había solicitado al Gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, la inmediata destitución de su cargo a Orlando Rivera debido a todas las acusaciones de viajes pagos por personas que él debe regular o que están en proceso de ser evaluados por la Comisión de Juegos, sin embargo, Fortaleza nunca emitió declaraciones sobre este particular” sostuvo Rivera Madera, quien detalló que de los viajes confirmados dos fueron a la ciudad de Barcelona.
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“Ya es hora de que las instituciones de nuestro país sean defendidas de cualquier acto que pudiera lacerar su imagen y más aún una industria como la de juegos en la que se debe priorizar la confianza y seguridad”, manifestó Rivera Madrera quien adelantó que la renuncia del Comisionado, “no detendrá las investigaciones que iniciamos y en la que sabemos saldrán a relucir la participación indebida de otros funcionarios de esta agencia”.
Por su parte el representante Matos García expresó que, “quedan personas por renunciar en la Comisión de Juegos y estos actos criminales cometidos deben tener consecuencias. Confío que el FBI (Buro Federal de Investigaciones) hará su trabajo”.
