Las autoridades federales, en conjunto con la Policía de Puerto Rico y el Departamento de Seguridad Pública, radicaron cargos contra veinte miembros de la organización criminal “Los Lobos”, quienes operaban en el municipio de Cabo Rojo, por conspirar para vender y distribuir sustancias controladas.
Cada uno de los acusados, salvo a tres personas, fueron detenidas en la pasada semana o ya permanecían recluidos en una institución carcelarias por cometer otros crímenes separados a estos.
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Por ahora, las personas que permanecen prófugos son Alexander Olivo Franqui, conocido también como “El Menor”; Jean Paul “Jampi” Lamboy Palermo; y Brenda L. Rodríguez Rosado.
“Esta ganga operaba desde el 2015 hasta el 2019 en el residencial público Santa Rita de Casia, además de otras areas del municipio de Cabo Rojo. El FBI (Negociado Federal de Investigaciones), la Policía de Puerto Rico y el Strike Force de Mayagüez están a cargo de la investigación con la colaboración de los algualices federales”, detalló el jefe de la Fiscalía Federal en San Juan, Stephen Muldrow.
De acuerdo al pliego acusatorio, los acusados presuntamente traficaban sustancias como cocaína, crack, marihuana y Percocet alrededor del residencial público. Esa operación se realizaba desde diversos roles dentro de la organización criminal como líderes, vendedores, “runners” y facilitadores.
A su vez, cada uno de los acusados enfrentan un mínimo de 10 años o vida en prisión por los cargos de narcotráfico. De ser hallados culpables por los cargos de drogas y armas de fuego, podrían enfrentar un mínimo de 15 años en prisión hasta cadena perpetua.
Durante la conferencia de prensa en la que se anunció la operación, Muldrow estuvo acompañado por el jefe del FBI en Puerto Rico, Joseph González, el secretario del Departamento de Seguridad Pública, Alexis Torres Ríos, el comisionado de la Policía, Antonio López Figueroa, entre otros oficiales de seguridad.
